Fomento retrasa un año las obras públicas estatales pero garantiza para 2011 la alta velocidad entre Ourense y Santiago

Actualizado: miércoles, 19 mayo 2010 22:38

Blanco dice que no puede "confirmar todo el Eje Atlántico" y apuesta por una mayor aportación de fondos privados y de las comunidades

MADRID/SANTIAGO DE COMPOSTELA, 19 May. (EUROPA PRESS) -

Las obras de carreteras y ferrocarriles que ejecuta el Ministerio de Fomento sufrirán un retraso medio de al menos un año como consecuencia del recorte de 6.400 millones de euros que experimentará su presupuesto de inversión en dos años (2010 y 2011), anunció hoy el titular del departamento, José Blanco, quien garantizó que la conexión de alta velocidad ferroviaria entre Ourense y Santiago estará lista en 2011, como está comprometido, pues se trata de una infraestructura "muy madura".

Fomento será así el Ministerio que absorberá "el mayor impacto" de la reducción de inversión pública anunciada por el Gobierno dentro del paquete de medidas de ajuste para reducir el déficit público. Blanco aclaró, en respuesta a preguntas del diputado del BNG Francisco Jorquera que, aunque se mantiene la fecha para el AVE Ourense-Santiago, dada su avanzada ejecución, no está "en condiciones de confirmar todo el Eje Atlántico" ferroviario. Tampoco concretó si se mantiene la fecha de 2015 para la conexión con la Meseta.

El titular de Fomento apuntó que el Eje Atlántico es también "una infraestructura madura en su grado de ejecución", por lo que apostó por "rentabilizarla cuanto antes" y "mantener los tiempos". No obstante, señaló que Portugal introdujo "incertidumbres" sobre la conexión entre Oporto y la frontera con Galicia, por lo que el ministro puso en duda la pertinencia de desarrollar la vía desde Vigo a la frontera lusa "si Portugal no hace esta infraestructura". Por la contra, sugirió que, en tal caso, los recursos se destinen al resto del Eje Atlántico.

Blanco no concretó el futuro del resto de la conexión de AVE entre Galicia y la Meseta ni el de otras infraestructuras que se ejecutan o proyectan para la comunidad, aunque afirmó durante su comparecencia que la tiene "muy presente" y se refirió a sí mismo como "una persona de palabra" que cumple sus compromisos.

En cualquier caso, apostó por implementar el transporte de mercancías por tren y, en línea con ello, las conexiones con los puertos. En este punto, destacó que entre las prioridades estarían las infraestructuras hasta puertos como el de Barcelona o el de Ferrol.

Blanco explicó que el impacto de este ajuste en Fomento tendrá "consecuencias en todo el territorio", dado que obligará al Ministerio a "replantear todo el programa de inversión pública" de los cuatro próximos años para "reprogramar la mayoría de las inversiones que se están acometiendo y reconsiderar las que no son imprescindibles".

"Esto se traduce en que vamos a posponer nuevas licitaciones, demorar plazos de finalización de obras, suspender temporalmente actuaciones e incluso anular contratos en ejecución", concretó el ministro ante la Comisión de Fomento del Congreso.

"Con el presupuesto actual no se van a cumplir los objetivos fijados en el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes 2005-2020", que guía las actuaciones de Fomento, "que será revisado", añadió.

A LA ESPERA DEL NUEVO MARCO PRESUPUESTARIO

Blanco informará del "cuadro definitivo de inversiones para este nuevo escenario", cuando, tras el ajuste, quede definido el marco presupuestario del próximo cuatrienio.

Asimismo, esperará también a conocer el nuevo escenario presupuestario para definir los proyectos que se acometerán con capital privado en 2010 y 2011 en el marco del nuevo Plan Extraordinario de Infraestructuras, con el que se busca paliar el descenso de recursos públicos.

El nuevo ajuste de inversión pública ha obligado a Fomento a "revisar" los proyectos de este plan, que además escaparán de los retrasos de ejecución previsto para las obras que se financian íntegramente con los presupuestos públicos.

En su comparecencia en el Congreso, Blanco enmarcó el ajuste de su Ministerio en el "esfuerzo de austeridad y responsabilidad" que es preciso realizar en aras del objetivo global de reducción del déficit.

CAMBIO DE POLÍTICA

No obstante, advirtió que el recorte de inversión en 2010 y 2011 tendrá "consecuencias" en los ejercicios posteriores. "La senda que se marca es irreversible y ya nada será lo mismo en la obra pública", porque, según aseguró, "en los últimos años se han planificado infraestructuras por encima de las realidades y las necesidades del país".

En este punto, destacó que el "impulso sin precedentes" realizado en infraestructuras de transportes en España duplica al de países europeos vecinos, y ha supuesto que el país sea el primero de la UE por kilómetros de autovías y uno de los primeros del mundo por kilómetros de AVE.

"Pero este nivel de avance no se puede mantener ante el nuevo contexto económico y financiero", aseveró. "Probablemente nadie se quede contento. Alcaldes, presidentes regionales, diputados, senadores de todos los partidos expresarán sentimientos de agravio", reconoció.

Por ello, Blanco apeló a la responsabilidad y a superar el "victimismo" para abordar un "nuevo enfoque" en política de infraestructuras y a consensuar un nuevo modelo de financiación de obras públicas.

La nueva estrategia llevará a "aprovechar al máximo las infraestructuras existentes, antes de construir una nueva". A la hora de construir, "priorizará los proyectos estrictamente necesarios por su aportación a la economía y a la cohesión social", y buscará abaratar el coste de las obras en una media del 22%.

MÁS CAPITAL PRIVADO Y DE CC.AA

Además, se "profundizará" en la aplicación de nuevos modelos de financiación, como la aportación de capital privado, y se pedirá una mayor contribución de las comunidades autónomas.

Asimismo, Blanco impondrá un plan de austeridad en su Ministerio que permitirá un ahorro de gastos de 1.200 millones de euros hasta 2013.

Los principales ejes de este programa de ahorro, adicional al plan de austeridad impuesto por el Gobierno, será la reducción de cargos públicos y de su remuneración, la introducción de mayor eficiencia en el diseño y contratación de las obras, y la reestructuración de empresas públicas dependientes del Ministerio y reducción de sus consejos.