La formación y la cuestión laboral: deberes de las comunidades autónomas ante los retos de la IA

Algunos de los robots presentados por la empresa de robótica Casual Robots en Madrid
Algunos de los robots presentados por la empresa de robótica Casual Robots en MadridEUROPA PRESS - Archivo
Actualizado: sábado, 29 junio 2019 11:58

Expertos avisan de la llegada de la automatización y la urgencia de adelantarse a la desaparición de puestos de trabajo, para evitar la exclusión social

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -

La llegada de la inteligencia artificial, o mejor dicho su expansión a todas las facetas de la vida cotidiana, traerá consigo un cambio sustancial en el paradigma social y sobre todo laboral, puesto que la extensión de la automatización obligará a los diferentes responsables públicos a estar preparados para aprovechar nuevos nichos de mercado, anticiparse a la desaparición de puestos de trabajo tradicionales y evitar situaciones de exclusión social.

Es por ello que los expertos en este campo y en sus diferentes vertientes urgen al Estado y a las diferentes comunidades autónomas a afrontar estos retos y adoptar políticas públicas decisivas, pero asumiendo que se trata de una cuestión transversal y que requiere una reforma educativa de calado, un sistema formativo adaptable.

Ricard Martínez, Cátedra de Privacidad y Transformación Digital Microsoft de la Universitat de Valencia, ha participado estos días en Santiago en las jornadas sobre Intelixencia Artificial e Desenvolvemento Humano, en las que decenas de expertos reflexionaron precisamente sobre la necesidad de transformación de los métodos formativos y los contenidos, sobre todo en la universidad.

El experto ha explicado, en una entrevista con Europa Press, que las inmensas aplicaciones actuales de la Inteligencia Artificial abarcan desde cuestiones "muy primarias a otras más sofisticadas". Por ejemplo, una empresa valenciana cuenta con unas herramientas automatizadas de limpieza que realizan un escaneo de toda la casa y ellas mismas toman las decisiones y definen las zonas por las que pasan, para que la vivienda esté limpia "en tiempo real".

También se están utilizando herramientas de analítica de datos con fines de marketing en redes sociales, en las que una máquina estudia las preferencias y el time line de los usuarios para decidir la información y la promoción que le aparecerá en su perfil personal.

Otras entidades están ensayando tecnologías basadas en IA para la toma de decisiones en entornos bancarios o en el ámbito de los seguros, para analizar los riesgos, e incluso la utilización de bots y herramientas de asistencia telefónica para la prestación de servicios de información a estudiantes.

El sistema de salud británico cuenta ya con herramientas para la atención telemática a pacientes que verifican diferentes aspectos del interlocutor, si está inquieto, nervioso, y realizan sugerencias al médico en función de su historial y su comportamiento para realizar un mejor diagnóstico "a partir de decisiones automatizadas".

En el mundo del derecho, hay sistemas de búsqueda inteligente en el ámbito del derecho mercantil que permiten al abogado contar con legislación, jurisprudencia y precedentes aplicables, además de calcular el porcentaje de posibilidades que tiene de ganar un caso concreto.

UNA CUESTIÓN TRANSVERSAL

A la vista de la situación, los responsables públicos tendrán que tomar medidas "estratégicas" y "no perder la perspectiva a largo plazo", ha considerado el investigador, teniendo en cuenta que los sistemas educativos deben ser "esencialmente adaptables" para hacer frente a procesos de decisión que, por estas tecnologías, "se solucionarán a enorme velocidad".

Por otro lado está la cuestión laboral. Ricard Martínez ha indicado que un informe hablaba de que "millones de trabajos desaparecerán" por la extensión de metodologías de automatización, al tiempo que "surgirán nuevas profesiones". Es por ello que los Estados y las comunidades autónomas deben "estar capacitados para ocupar nuevos nichos de empleo", un objetivo que "implica a la universidad y a la formación", pero desde un punto de vista "transversal".

Martínez ha considerado que los diferentes gobiernos deben orientar sus medidas para "evitar la exclusión social" ante la probable caída del empleo, pero siempre destacando que este tipo de avances puede sacar a la sociedad "de trabajos repetitivos, peligrosos", logrando que las profesiones sean una cuestión "más cualitativa que cuantitativa".

"Hay que empezar a asumir que hay cosas que cambiarán rápido y no pueden esperar cinco años. Deben ser planificados basados en valores, pero con una enorme capacidad de adaptación. Hay conocimientos tecnológicos que pasarán por nuestra ventana en los próximos 12 meses y, o somos capaces de hacerles frente en términos educativos, o cuando nos pongamos al día otros países llevarán dos años formando en esa materia".

ÉTICA Y DERECHO

Uno de los aspectos que deben introducirse es la ética, sobre todo la ética jurídica, puesto que se está insistiendo "más" en cuestiones como la ciberseguridad y "se echa en cara que la tecnología no tiene en cuenta valores humanos, principios básicos" o el respeto al derecho. "Parece más importante que funcione, que sea eficiente, que produzca dinero, y la tecnología que no tiene en cuenta esto, cuando funciona mal, produce daños".

Es por ello que se necesitan profesionales "capaces de usar de modo inteligente esas herramientas, ser capaces de acompañar el proceso de evolución tecnológica". Del mismo modo, el mercado depende "muchísimo de un buen asesoramiento jurídico", un tema en el que Galicia "está trabajando muy seriamente".

"Si unos chicos inventan una nueva APP y no encuentran un sólo abogado que les pueda ayudar... tienen un proceso muy serio solo en protección de datos, y las multas pueden ser muy graves".

LA VENTANA DE LA OPORTUNIDAD

Los currículos y metodologías educativas deben iniciar a introducir aspectos computacionales y algoritmos, además de temas de seguridad, ha insistido Martínez, y la educación tiene que dejar de enfocarse no tanto desde el alarmismo y el riesgo, sino "desde la capacidad de proporcionar herramientas".

"Tenemos un reto brutal. ¿Como esperamos que estos niños sean capaces de afrontar la llegada de la inteligencia artificial su la formación básica está de espaldas a esta realidad?", ha lamentado, insistiendo en que, "por alguna razón", en España se centra "más en riesgos y no en oportunidades".

El experto ha indicado, al respecto, que unos estudios sobre riesgos TIC revelaron que los jóvenes de países escandinavos, como Suecia, están "más expuestos a riesgos" que los españoles en la Red, y sin embargo "un chico sueco sabe reaccionar" ante una situación de peligro por la implantación de Internet y las nuevas tecnologías en el sistema educativo.

"¿Qué preferimos, gente altamente formada y con altas capacidades o solo centrarnos en el riesgo? La sociedad que solo se centra en el riesgo y no las oportunidades pierde el tren de la innovación". En pocos años, ha insistido, España tendrá que decidir "si quiere ser productora e innovadora o consumidora" y es ahora cuando tiene "la ventana de la oportunidad para estar a la cabeza de los países" desarrolladores.