Gabriel Rodríguez asegura que en la calle "se sabe quién dio la patada que mató a Manuel Ríos"

Actualizado: jueves, 23 marzo 2006 21:06

Niega haberse "entregado" a la Policía y mantiene que acudió a la comisaría "a colaborar" para saber "en todo momento" la verdad

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -

Gabriel Rodríguez, que fue absuelto ayer de la muerte del hincha del deportivo Manuel Ríos por la Audiencia Provincial de A Coruña, aseguró hoy sentirse "muy contento" por la sentencia, ya que "por fin se ha hecho justicia" y afirmó que "en la calle se sabe quién dio la patada".

En una entrevista en la Cadena SER recogida por Europa Press, Rodríguez afirmó que sólo "los periódicos" lo señalaban como culpable y señaló que tanto la novia de Ríos como el amigo que los acompañaba, "los testigos que estaban allí", declararon que "no fue" él con lo que, según afirmó, "queda todo bastante claro". Además, insistió en que en la calle se conoce la verdad "se sabe, se pisa, pero nadie la quiere ver".

'Gabi' negó haberse "entregado" a la Policía y mantiene que acudió a comisaría "a colaborar", ya que "en todo momento" quería saber la verdad. "Estuve ahí siempre para saberla", aclaró. "También soy persona y padre y puedo llegar a saber qué es que un hijo te muera", aseveró.

"ME HAN CRUCIFICADO"

Rodríguez aseguró que, desde el momento de la detención, su vida "cambió bastante" porque se vio "afectado debido a la presión mediática". "Me han crucificado por todos lados sin conocerme, han dicho muchas falsedades sobre mí y uno no está para esas cosas", afirmó.

Durante este tiempo, lo peor, a su juicio, fue "la injusticia" que estaban cometiendo con él. Así, indicó que hubo "muchísimas cosas" que le dolieron, especialmente que le llamaran "asesino".

No obstante, cree que la sociedad llegará a verlo como inocente. "La gente que tengo a mi alrededor siempre ha sabido como soy yo, nunca han dudado de mí. En A Coruña, la gente sabe cómo soy y que todo lo que ha dicho la prensa sobre mí no es verdad", dijo.

Sin embargo, evitó relatar cómo habían sucedido los hechos el 7 de octubre de 2003, día en que falleció Ríos tras un partido entre deportivo y Compostela en Santiago, porque "está todo en los autos para cualquiera que lo quiera ver".

DESPLAZAMIENTO, NO PATADA

Además, negó haber dado una patada a nadie y aseguró que fue "un desplazamiento con la planta del pie, a la altura del culo", aunque no sabe a quién. También admitió que la pelea en la que se vio involucrado "no tuvo que ver con el fútbol" y recordó que, pese a las acusaciones de "violentos" y "ultras", su absolución lo ha dejado "todo claro".

Asimismo, Rodríguez negó que la sección 'Los Suaves', perteneciente a los Riazor Blues, fuese "violenta" y lo justificó con el testimonio en el juicio del policía encargado de las cámaras de seguridad en el estadio de Riazor. "Él es el que mayor conocimiento tiene de todas las peñas y ha dicho que no son violentos y que en Riazor no hay ninguna peña violenta. Y si lo dice él, que es el que más sabe, tiene que ir a misa", subrayó.

"ESTOY FELIZ, COMO EN UNA NUBE"

Sin embargo, Gabriel no se plantea lo que pasará a partir de ahora. "No sé, estoy feliz, como si estuviera en una nube porque se ha hecho justicia después de estos tres años que han sido muy duros para mí y mi familia", afirmó.

Además, indicó que su hijo, de 11 años, "gracias a Dios no se ha enterado" aunque admitió que "será un trago muy malo tener que explicarle todo el día de mañana" porque, añadió, "puede que alguien le diga que ha salido en los periódicos que su padre es un asesino".

Por otra parte, aseguró que desconoce si su abogado estudia solicitar una indemnización por los ocho meses pasados en la cárcel. Gabriel tiene trabajo y dice estar "tranquilo, siempre lo estuve y mi conciencia también", pero no niega que haber quedado "un poco señalado, porque salió la foto en todos lados". "Espero que pase con el tiempo", concluyó.