La plantilla de Draka lamenta la retirada del plan de reindustrialización aunque sospecha que era un "lavado de cara"

Actualizado: miércoles, 3 septiembre 2008 22:08

Los trabajadores comunicaron lo ocurrido a la Xunta y no descartan retomar las movilizaciones

VIGO, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente del comité de empresa de Draka Cables, Alberto Míllara, afirmó hoy que los trabajadores de la planta, ubicada en la localidad pontevedresa de Mos, están "defraudados" y se sienten "engañados" ante la retirada del plan de reindustrialización, una propuesta que calificó como "lavado de cara" por parte de la firma.

En declaraciones a Europa Press, Míllara aseguró que el plan presentado por la empresa fue "una mascarada para decir que ellos lo intentaron pero que los sindicatos y la Xunta no quisieron". Así, criticó que, una vez que Draka presentó su iniciativa de reindustrialización con las empresas Narwhal y Colyaer como interesadas, el pasado 18 de julio, "sólo quería dar una semana" para que la Administración y los sindicatos estudiaran el proyecto, cuando estos pedían un mínimo de un mes.

El representante de los trabajadores afirmó que "Draka renunció y se justificó en que el día 31 de julio (dos semanas después) terminó el contrato con las otras dos empresas" y, por tanto, no pudo fraguar el acuerdo. "Tiró balones fuera diciendo que los demás no tuvimos tiempo de reacción", añadió.

Por ello, aseguró que la oferta realizada fue "un lavado de imagen para quedar bien porque sabían que no daba tiempo a estudiar la propuesta". Así, acusó a la empresa de tener la intención de "deslocalizarse al norte de África o a México", una vez que "ya no tiene más subvenciones en Galicia".

REUNIÓN XUNTA

Míllara participó hoy en una reunión entre representantes de los trabajadores, de la Dirección Xeral de Relacións Laborais y del Instituto Galego de Promoción Económica (Igape) y afirmó que los responsables de estos departamentos también manifestaron estar "contrariados" por la retirada del plan.

Así, las partes quedaron pendientes de celebrar una nueva reunión una vez que la Administración haya analizado la situación. "Esperaremos a que nos llame la Xunta y, según lo que digan, veremos si organizamos nuevas movilizaciones", aseguró el presidente del comité de empresa.

Mientras tanto, desde que el pasado abril Draka anunciara el cierre de la planta de Mos para final de año, el centenar de empelados de las instalaciones (todo ellos indefinidos) sigue trabajando en la planta.