SANTIAGO DE COMPOSTELA, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
El PSdeG no ha logrado todavía que la alcaldesa de Cabanas (A Coruña), Modesta Anca, renuncie a su cargo, tras ser condenada a ocho años de inhabilitación, y prevé dedicar el fin de semana a persuadirla de que dimita, con el objetivo de resolver el caso el próximo lunes sin tener que recurrir a la expulsión.
Así, fuentes socialistas consultadas por Europa Press aseguraron que el primer día de la próxima semana podría ser "clave" para poner fin a un episodio que comenzó el pasado viernes, cuando la sala de lo Penal número 1 de Ferrol dictó sentencia contra Anca por un delito contra la ordenación del territorio.
Ese mismo día, la dirección autonómica aconsejó a la regidora, en el marco de la "presunción de inocencia", que cediese el bastón de mando que ostenta desde hace 23 años como "muestra de compromiso con la ciudadanía y con el propio partido". Inicialmente Anca se había comprometido a "reflexionar" su marcha pero, tras la asamblea del PSOE local del pasado lunes, en la que la militancia le demandó por unanimidad que continuase, resolvió no dimitir.
Desde entonces, la formación ha mantenido contactos con la regidora, hasta ahora en vano, a fin de convercerla de que renuncie puesto que, al tratarse de una "persona muy querida", prefiere agotar todas las opciones con el propósito de evitar la apertura de un expediente de expulsión.
En consecuencia, fuentes socialistas explicaron que las "48 horas" apuntadas el pasado miércoles por el presidente de la Xunta y secretario general del PSdeG, Emilio Pérez Touriño, como plazo límite para resolver el conflicto era "orientativo".
SOLUCIÓN "INMEDIATA"
En este sentido, el objetivo de Touriño era "transmitir que la solución se daría de manera inmediata", si bien el partido "se ha dado estos días para que --Anca-- reflexione" y la cuestión se pueda zanjar "pasado el fin de semana".
Para ello, los socialistas mantienen una labor de interlocución con la regidora, sin éxito hasta ahora, puesto que aspiran a "evitar la expulsión a toda costa". No obstante, si finalmente no logran inducirla a renunciar, se procedería a la apertura de un expediente de suspensión cautelar de militancia, que se elevaría al Comité de Garantías Federal, el organismo que finalmente se encargaría de juzgar el caso y decretar su consiguiente expulsión del partido.
La propia Anca rechazó pronunciarse al respecto y se limitó a declarar que "la decisión de la agrupación de Cabanas no coincide con la del PSdeG". Además, esta semana permaneció alejada de la actividad institucional, puesto que antes de que se emitiese la sentencia preveía realizar un viaje de siete días que ya tenía programado. Sin embargo, la evolución de los acontecimientos la llevó a anular estas vacaciones, si bien mantuvo su retiro, puesto que ya había formalizado la delegación de poder en funciones en el teniente de alcalde, José Rey.
