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SANTIAGO DE COMPOSTELA, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Facenda del Grupo Socialista, Juan Carlos González Santín, ha exigido este sábado a la Xunta que explique en el Parlamento "qué va a pasar con los más de 8.000 millones de euros de diferencia entre los más de 9.000 millones (de dinero público) invertidos en Novagalicia Banco y los 1.000 que ahora paga la venezolana Banesco" para hacerse con la entidad.
De este modo, el socialista ha registrado una pregunta en la Cámara gallega en la que insta al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y al líder del Gobierno central, Mariano Rajoy, a que "tienen que explicar quién va a pagar esta cantidad", después de que "el saneamiento" de la entidad financiera "costase 9.000 millones a los contribuyentes españoles" y haber "perdido" 8.000 millones de dinero público.
En este sentido, denuncia que Rajoy "dijo en su día que no iban a pagar los contribuyentes" el rescate a entidades financieras, "que lo pagaría la banca y, por lo que se ve ahora, esto no será así".
Así, González Santín critica que la venta de NCG por 1.003 millones de euros "demuestra que fue una venta precipitada y un ejemplo más de política errática del Gobierno gallego en materia financiera".
PAGO APLAZADO Y GALLEGUIDAD
En la línea, avisa que "la realidad es que, finalmente, el grupo venezolano Banesco adquirirá el 88,3 por ciento de la entidad gallega desembolsando apenas 400 millones de euros al formalizarse la operación", de forma que el resto será abonado en sucesivos plazos hasta 2018.
Junto a esto, el diputado socialista recrimina que Novagalicia Banco "perderá definitivamente su galleguidad", mientras que "los 600 millones de euros que serán demorados serán financiados con los beneficios que genere la entidad en los próximos años". "Estos beneficios serán para Banesco y no para el Estado, como ocurriría si se vendiese el banco sin tantas prisas", lamenta.
Por otra parte, Juan Carlos González Santín censura que, a día de hoy, "nadie responde" a los afectados por participaciones preferentes, ya que los responsables de la entidad "escapan del asunto" y el Gobierno gallego "se sitúa de perfil".
