Quintana cree que el BNG responde "a la demanda de los ciudadanos gallegos de acabar con mayorías absolutas"

Actualizado: lunes, 26 mayo 2008 23:00

El nacionalista apuesta por "un gran consenso" económico y social para hacer frente a la crisis económica

A CORUÑA, 26 May. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, consideró hoy que el BNG ofrece "una aportación positiva" al Gobierno de la Xunta porque "responde a la demanda de los ciudadanos de enterrar definitivamente las mayorías absolutas" en Galicia.

"Hace tres años los gallegos dijeron claro y fuerte que este es un país plural con un mapa político a tres y que además querían que el gobierno también fuera reflejo de la pluralidad. El BNG ha dado contenido a ese deseo con un compromiso de gobierno que más que con el partido socialista es con los ciudadanos", apuntó.

Así, en declaraciones a los periodistas antes de impartir una conferencia en A Coruña sobre 'O BNG na Xunta de Galicia, diante do novo escenario político e económico' en el Club Financiero Atlántico de A Coruña, señaló que el BNG "ha luchado con humildad e insistencia para que Galicia tuviera una contribución más fuerte en el Estado".

En su conferencia, Quintana apostó por construir "un gran consenso" político y social que sume a los agentes más dinámicos y emprendedores de la sociedad gallega para "viabilizar innovadoras soluciones a los desafíos de la economía gallega" y, de esta manera, poder hacer frente a la crisis.

Este consenso sirve para comprometerse "con el futuro de una nueva frontera para el autogobierno de Galicia" y supone el eje en el que centrar la acción del Gobierno gallego para, por un lado, "afrontar con éxito la desaceleración económica" y, por otro, afianzar el autogobierno gallego "acrecentando sus potestades, competencias y fortaleza financiera".

Así el vicepresidente de la Xunta consideró que para que Galicia y sus empresas puedan competir en un mundo de economía global y hacer frente a las amenazas de desaceleración hay que cooperar "intensamente", para lo que la Xunta "tiene que hacer valer su capacidad de convocatoria y la potencia de sus recursos para construir esa gran red de cooperación económica, social y cultural que permita hacer frente a los desafíos del siglo XXI".

CRISIS ECONÓMICA.

Quintana consideró en su ponencia que la situación económica actual "debe calificarse de crisis" y, ante ella, "resulta tan perjudicial el alarmismo como el inmovilismo y la pérdida de iniciativa" ya que, "sin haber recetas mágicas", existen "importantes ramas de actividad que mantienen fuerte el dinamismo y demuestran una gran capacidad para generar empleo".

Al respecto habló de la necesidad de "diversificar" la actividad económica para que, aunque la construcción siga siendo un motor de la economía, "se maduren estrategias que refuercen el papel del sector energético, las industrias del conocimiento, la economía del bienestar o las nuevas actividades productivas del medio rural" para que Galicia siga creciendo.

Así añadió que las políticas de respuesta a la crisis desde la comunidad deben basarse en seis pilares: impulso a la obra pública, convertir el medio rural en un espacio estratégico prioritario, ampliar las capacidades del sector energético, una política industrial activa, acrecentar las inversiones en la economía del conocimiento, e impulsar nuevos servicios vinculados a los políticas de igualdad y bienestar.

En política de vivienda pretende favorecer el acceso a los sectores menos favorecidos y dinamizar el sector con una "apuesta decidida" por la vivienda protegida; para convertir el ámbito rural en un sector estratégico recordó que Galicia cuenta con "grandísimas potencialidades agroganaderas y forestales"; y en el ámbito energético consideró necesario ampliar las capacidades de Galicia como "campo prioritario en los que articular una nueva alianza con agentes económicos".

Además con una política industrial activa, destacó que la Consellería de Innovación está trabajando para consolidar los sectores industriales con mayor capacidad de generación de empleo y que están en fase expansiva. Al acrecentar las inversiones en conocimiento Quintana pretende colocar a Galicia "en la vanguardia de las estrategias de competitividad".

Finalmente, Quintana se refirió al eje del bienestar que supone una apuesta por los servicios de igualdad y bienestar y por articular una red pública de servicios sociales que institucionalice estos recursos al mismo nivel de la sanidad o la educación.

TRANSFERENCIAS.

En su intervención el vicepresidente señaló que, aunque el Gobierno gallego se encuentre al final de una legislatura, "lejos de ser un tiempo de descuento políticamente marginal, se inicia un periodo decisivo para consolidar cambios fundamentales".

Una de las cuestiones claves es para el nacionalista es "seguir ahondando en el proceso de transferencias para ampliar las capacidades del actual autogobierno gallego, dando pleno desarrollo a las consideradas en el Estatuto de Autonomía de 1981" y con un lugar "preeminente" para el traspaso de la de tráfico y seguridad vial.

Sobre esto recordó que en la sociedad gallega "existe una opinión absolutamente mayoritaria a favor de que Galicia cuenta con más medios y competencias para afrontar la alta siniestralidad y desarrollar una política propia en materia de seguridad vial".

Quintana indicó que ahora le corresponde al Parlamento nacional dar respuesta a esta demanda que además "cumple rigurosamente con los criterios que fija el Gobierno cuando recibe una demanda para la ampliación de competencias". Además consideró que esta transferencia "es un símbolo del autogobierno del país pero también una demostración de fortaleza de la sociedad gallega para conseguir consenso alrededor de sus intereses".

Además calificó de "fundamental" la reforma del actual sistema de financiación autonómico para "de una vez romper con el mito de que Galicia es un país subsidiado" y apostar por la "autorresponsabilización nacional" aspirando a la "autonomía y suficiencia financiera" para la comunidad.

Finalmente abordó la "importancia" de conseguir un nuevo Estatuto para Galicia "que nos coloque al mismo nivel que las demás naciones del Estado, que amplíe y blinde el ámbito competencial y que permita autorresponsabilizarse en la construcción de un Estado plural".

El documento deberá fijar las bases financieras con las que impulsar nuevas políticas de desarrollo productivo, la extensión de servicios públicos de bienestar y consolidar las estrategias de normalización lingüística y cultural.