Roban en una joyería de Ourense después de amordazar a los hijos de la dueña y a su empleada de hogar

Actualizado: sábado, 1 julio 2006 19:40

La Policía sospecha que los dos individuos involucrados en el robo proceden de Europa del Este

OURENSE, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -

Dos individuos robaron ayer dinero y varios artículo de gran valor en una joyería de Ourense, después de entrar en el piso de la dueña del negocio y amordazar a sus hijos menores de edad y a la empleada del hogar, quien también fue golpeada.

Los hechos sucedieron a las dos menos cuarto del mediodía de ayer, cuando dos hombres, que se hicieron pasar por empleados de una empresa de reparto, accedieron al domicilio de la propietaria de la joyería Cota, situada en el número siete de la calle Bedoya, en Ourense.

En el piso de la propietaria, ubicado en el mismo edificio que la joyería, se encontraba la empleada de hogar y los dos hijos de la dueña del negocio, menores de edad. Los delincuentes maniataron a los tres habitantes, además de golpear a la empleada de hogar.

Minutos después llegó a la vivienda la propietaria del establecimiento, tras cerrar el negocio, y se encontró con los dos delincuentes armados. Al entrar en su casa, uno de los asaltantes la obligó a bajar con él a la joyería para, finalmente, hacerse con una cantidad importante de dinero de la caja fuerte y varios artículos de elevado valor. El otro delincuente se quedó en el piso con la empleada de hogar y los menores.

INVESTIGACIÓN POLICIAL

Actualmente, se está llevando a cabo el recuento del valor de los artículos sustraídos, así como de la cantidad de dinero que se encontraba en el establecimiento, que, al parecer, rondaba los 10.000 euros. Según fuentes policiales consultadas por Europa Press, se sospecha que los dos hombres involucrados en el robo, que actuaron a cara descubierta, procedan de algún país del este europeo.

Además, las mismas fuentes informaron que tanto la dueña de la joyería, como sus hijos y la asistenta se encuentran "bien", y reconocieron que las pesquisas policiales están "en punto muerto" aunque esperan obtener más datos de los delincuentes el lunes.

A pesar de la hora del robo y de la situación céntrica de la calle Bedoya, en donde se registró el robo, no existen testigos de lo sucedido. Los vecinos consultados reconocieron no haber visto nada que le resultase extraño a esas horas.