UPA demanda un "plan de choque" para paliar las pérdidas del sector, que cifra en más de 2.500 millones
SANTIAGO DE COMPOSTELA//MADRID, 7 May. (EUROPA PRESS) -
Más de 1.500 ganaderos gallegos, según Unións Agrarias, secundaron hoy la multitudinaria manifestación convocada en Madrid para exigir al Gobierno medidas contra los "abusos" en los mercados agroalimentarios, que registran precios "cada vez más bajos" para los productores y subidas "imparables" para los consumidores.
La protesta, que se desarrolló sin incidentes, partió de las oficinas del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino en la plaza de San Juan de la Cruz bajo el lema 'Precios justos para nuestros productos' y transcurrió por el Paseo de la Castellana, para finalizar frente al Ministerio de Economía, donde los ganaderos --procedentes de distintas comunidades autónomas, entre ellas Cantabria-- repartieron más de 2.500 bandejas de carne de cordero.
Precedidos por un tractor y cuatro personas disfrazadas de vacas, los manifestantes marcharon en un ambiente festivo haciendo sonar silbatos, bombos y cencerros, coreando consignas como 'Zapatero ayuda al ganadero' y portando pancartas en las que se podía leer 'En defensa de las explotaciones, ayudas directas ya'.
En declaraciones a Europa Press, el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, estimó que la crisis de la ganadería ha supuesto la desaparición de 65.000 explotaciones y pérdidas superiores a 2.500 millones de euros, por lo que el sector "no puede aguantar ni un día más así".
"El Ministerio de Agricultura ha desaparecido, pero nosotros lucharemos con fuerza para no desaparecer", subrayó el dirigente agrario, que afirmó que la manifestación de hoy constituye un primer acto de protesta al que seguirán más movilizaciones por todo el país.
Por su parte, el secretario general de UU.AA, Roberto García, subrayó la necesidad de garantías para que los productores cuentes con "rentas dignas" que proporcionen estabilidad al sector. "Tenemos una función básica, que es la de proporcionar alimentos de calidad, con la seguridad alimentaria garantizada y, a mayores, cumplimos un imprescindible papel de vertebración territorial en el medio rural y de conservación del medio", reivindicó.
LEY DE MÁRGENES COMERCIALES.
Durante esta campaña de movilizaciones, con la que pretende que el sector deje de ser el eslabón "más débil" de la cadena agroalimentaria, UPA recogerá firmas para promover una iniciativa legislativa popular a fin de que se regulen los márgenes comerciales y "se penalice los comportamientos abusivos" de la distribución.
También tiene previsto entrevistarse con todos los grupos parlamentarios, con el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, así como con el presidente de la Comisión Nacional de Competencia, Luis Berenguer, para que "investigue a la distribución, que se está quedando con la mayor parte del beneficio".
"Se ha instalado la especulación, mientras el Gobierno dice que no puede hacer nada porque estamos en un libre mercado", lamentó Ramos, quien sostuvo que "será legal, pero no justo y ningún Gobierno puede consentir que haya cuatro canallas que se forren arruinando a los ganaderos y estafando a los consumidores".
Según denunció, los productores de carne de vacuno, cordero o porcino están percibiendo un 15% menos de lo que cobraban en 2007 por sus productos, mientras que el consumidor los compra un 10% más caro.
IMPEDIR EL "CIERRE SILENCIOSO".
Ante las sedes de los ministerios de Economía y Hacienda e Industria, Turismo y Comercio, la organización agraria instaló una plataforma con equipo de sonido para que los miembros de la ejecutiva pudieran dirigirse a los ganaderos presentes en la protesta, ante quienes aseguraron que no permitirán el "cierre silencioso" de las explotaciones. Según defendieron, el cierre no representa un fracaso de los ganaderos, sino de un sistema que "funciona mal".
Tras la manifestación, Ramos se entrevistó con el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, así como con altos cargos del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio y Economía y Hacienda, para hacerles entrega de un documento con sus reivindicaciones.
Además de las relacionadas con los márgenes comerciales, la organización agraria demanda un "plan de choque urgente" que permita paliar la crisis que atraviesa el sector ganadero por el alza de los costes de producción, un plan de reestructuración que incluya compensaciones sociales a quienes abandonen la actividad, incremento del IVA de compensación de la ganadería del 7,5% al 9% y ayudas directas en función del pienso consumido por explotación.
