PONTEVEDRA, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
El subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Delfín Fernández, calificó hoy de "históricamente positivo" el descenso de la siniestralidad vial en las carreteras interurbanas de la provincia, y lamentó que no se pueda aplicar esa misma valoración a las vías urbanas donde, recordó, la responsabilidad es de los ayuntamientos.
"Hay ayuntamientos que han avanzado mucho pero otros no avanzaron suficientemente", reprendió Delfín Fernández tras referir que durante 2008 hubo 45 muertos en vías interurbanas y 20 en vías urbanas.
El subdelegado del Gobierno insistió en que "visto en el conjunto de los últimos diez años, la siniestralidad fue descendiendo sistemáticamente en las vías competencia de la Dirección General de Tráfico, mientras que en los ayuntamientos tenemos la cruz", tras lo que apeló a la necesidad de que los ayuntamientos se "tomen serio la seguridad vial, porque tienen plenas competencias en la materia".
Fernández consideró que el "desafío" del Estado para 2009 en materia de seguridad vial es "mantener la presión" en las vías interurbanas, para seguir reduciendo la siniestralidad, y "colaborar intensamente" con los ayuntamientos.
"Deben aplicar el permiso por puntos, instalar semáforos, reducir la velocidad, recurrir a más pasos de cebra y presionar a través de la policía local" insistió Fernández al referir algunas de las medidas que los ayuntamientos pueden arbitrar. Su "responsabilidad", concluyó, es "regular en sus propias vías" con medidas que están a su disposición para combatir la "evolución tan irregular que ha caracterizado los últimos 10 años".
