av2" class="NormalTextoNoticia" itemprop="articleBody">
LUGO, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los trabajadores de Urbaser en Lugo consideran que "no se dan situaciones de emergencia" en la ciudad, a causa de la huelga de basuras que este sábado cumple su quinto día, para la intervención de la empresa Tragsa.
Más de 500 toneladas de basura se diseminan por la ciudad de Lugo en el quinto día de huelga de los trabajadores de Urbaser, coincidiendo además con la celebración del Arde Lucus, que prevé que este sábado se acerquen a la ciudad unas 200.000 personas.
No obstante, los trabajadores han asegurado que acudirán a la Fiscalía si, finalmente, irrumpe en el conflicto la empresa pública Tragsa para la retirada de basura de aquellas zonas en las que se almacena más cantidad.
"Es obvio que, a la vista de los informes sanitarios que hay, no hay situación de emergencia que justifique la entrada de Tragsa en la ciudad", ha sostenido la secretaria de la federación de servicios de la CIG, Carmen Antas.
A raíz de la decisión de los trabajadores de no respetar los servicios mínimos, impuestos en el cien por cien por el ayuntamiento de Lugo para el Arde Lucus, fueron despedidos diez trabajadores. Además, se les ha abierto expediente disciplinario a los once miembros del comité de huelga, con lo que pueden llegar a 21 los despedidos de una plantilla de 139.
Antas ha precisado que la "comunicación de los despidos se les remitió a los trabajadores, aunque a día de hoy alguno no lo ha recibido". "También es verdad que la gente está en la calle. Además se remitieron los expedientes disciplinarios a todo el comité de huelga. Esas son las medidas de presión que Urbaser ejerce contra la plantilla intentando dividirla y desestabilizarla aunque el efecto que están consiguiendo es el contrario porqué cada vez están más unidos los trabajadores", ha proclamado.
OFRECIMIENTO PARA SERVICIOS ESENCIALES
Por unanimidad de los 139 operarios y del comité de huelga se acordó remitir "por fax" un escrito al ayuntamiento, a la dirección de Urbaser y a la delegación de la consellería de Sanidade ofreciéndose el personal a salir a recoger la basura en las zona del colegio de la Aneja, de la guardería de Rosalía de Castro y en el colegio de los Franciscanos, tras decretarse en estas zonas la alerta sanitaria.
"La plantilla sigue estando a disposición de hacer los servicios esenciales en centros sanitarios, asistenciales y colegios públicos, ofrecimiento que hicimos desde el primer día de huelga y seguimos sin obtener ninguna respuesta", ha defendido la sindicalista de la CIG.
La plantilla mantiene un retén de un conductor y dos peones, que pone a disposición de la empresa para cubrir los servicios "esenciales". A la espera de que irrumpa Tragsa, Antas insiste en amenazar con acudir a la Fiscalía atendiendo a que se estaría "vulnerando el derecho de huelga". También se ha apresurado en negar ninguna "mano negra" detrás del conflicto tal y como sugiere la concejala de Cultura, Carmen Basadre.
