SANTIAGO DE COMPOSTELA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
La conselleira do Mar, Rosa Quintana, ha considerado necesario tomar medidas para "dar más valor" al pescado y al marisco en las lonjas después de que aumentasen un "13%" las descargas pero solo un "3%" la facturación.
"Tenemos una deuda aún pendiente, que es mejorar en la comercialización", ha manifestado la conselleira en una entrevista concedida a la Radio Galega, en la que se ha mostrado partidaria de "valorar más el producto" y "venderlo a través de criterios que acrediten la calidad diferenciada".
En su intervención, Rosa Quintana ha asegurado que los patrones le trasladan que este año "hay pescado" que es de "escaso valor comercial". "Yo les digo que no, que tienen que reflexionar y ponerse a mirar el pescado como consumidores", ha indicado la conselleira, que señala que, en las pescaderías no se ve ningún pescado a "menos de un euro el kilo".
Por otra parte, la titular do Mar ha considerado que, en los últimos años, la Comisión Europea está atendiendo demasiado los criterios ambientalistas para proteger caladeros de pescado, por encima de los criterios de empleo.
"TINTE MÁS AMBIENTALISTA"
"La Comisión Europa va cada vez más a un tinte más ambientalista. Eso es complicado para la gestión de una actividad económica", ha advertido la conselleira, que recuerda que Galicia y España, en el momento de la propuesta de reforma de la Política Pesquera Común, apostaban por "poner al mismo nivel los caracteres ambiental, social y económico".
Y es que, según ha indicado, "poco importa tener los caladeros en el Rendimiento Máximo Sostenible (RMS) en 2020 si por el camino se pierde el sector pesquero". "Las medidas deben conducir a mantener los caladeros en la mejor situación ambiental, pero también a mantener la actividad del sector pesquero", ha apuntado.
Como ejemplo, ha citado la propuesta que presentaron de forma conjunta España y Portugal para gestionar el caladero de la sardina ante la amenaza de un cierre de varios años por la escasez de ejemplares.
"Los científicos dicen que, si paralizamos totalmente la actividad de la pesca de la sardina, en el año 2023 tendremos el caladero en perfecto estado, pero tendremos destruido el sector", ha censurado la conselleira que se muestra partidaria de "mantener la actividad económica, mantener la explotación del recurso y recuperar también el caladero".
