La crisis impulsa a volver a las calles a ex prostitutas que pierden sus trabajos convencionales

Actualizado: sábado, 28 febrero 2009 14:35

Médicos del Mundo alerta de un repunte en esta actividad, con más de 2.118 meretrices atendidas en 2008, unas 600 más que al año anterior

PALMA DE MALLORCA, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

Una de las consecuencias que está teniendo la actual crisis económica sobre capas deprimidas de la sociedad es que algunas mujeres que, habiéndose dedicado a la prostitución y retirado posteriormente de ella para llevar una vida normalizada, se ven obligadas a volver a ejercerla, al perder sus actuales empleos y no encontrar otra salida.

Así lo confirmó, en declaraciones realizadas a Europa Press, la responsable del Centro de Atención Sociosanitaria a Personas que Ejercen la Prostitución de Médicos del Mundo en Mallorca, Francisca Ramírez, quien alertó de un repunte en esta actividad en el último año, ya que en 2008 atendió a un total de 2.118 meretrices, lo que supone unas 600 más que en 2007.

Ramírez, que desarrolla su actividad tanto entre prostitutas que trabajan en la vía pública como entre las que lo hacen desde prostíbulos, apuntó directamente a la crisis como factor desencadenante de esta situación, en un momento en el que, de hecho, esta actividad estaba descendiendo y señaló al "colectivo inmigrante" como principal aportador de nuevos casos.

Según la experta, "aunque no hemos hecho un estudio, hemos podido constatar que había muchas mujeres que habían dejado de ejercer, al haber conseguido otro tipo de trabajos, se han visto abocadas a volver" ahora, tras perderlos. Aunque también se da un descenso de clientes, que ahora piden rebajas de hasta un 20% por los servicios, según fuentes de la UIB.

"Ahora pueden estar una noche entera y sólo hacen un servicio o dos", señaló Francisca Martínez, que trabaja desde la sede de Médicos del Mundo en Palma y desde la unidad móvil, con la que recorre zonas como Puerta San Antonio, Avenidas o las inmediaciones del Hipódromo de Son Pardo, además de otros lugares y locales donde se concentran las meretrices.

Aunque esta ONG atiende principalmente a las personas que ejercen la prostitución en los peldaños bajos y medios de la escala --las consideradas de 'alto standing' fuertes ingresos--, incluyendo quienes trabajan por horas, quienes responden mediante un teléfono móvil a un anuncio en el periódico, quienes 'hacen la calle', al margen de que cuenten o no con proxeneta.

MÁS ETS Y POCO MIEDO AL VIH

El incremento de personas ejerciendo la prostitución también lleva emparejado que, desde principios de 2008 hasta ahora, Ramírez haya percibido un "incremento" de los casos de contagio de enfermedades de transmisión sexual (ETS), a veces debidos a "exceso de higiene"; mientras que también detectó una percepción de "bajo riesgo" respecto al VIH.

En total, son alrededor de 2.000 las personas que se dedican a la prostitución de forma estable en las islas, de las que 1.800 son mujeres, un centenar hombres y otro centenar transexuales. Y, aunque las nacionalidades representadas son muchas, predominan tres, brasileña, nigeriana y rumana; mientras que la cantidad de residentes autóctonas es residual.

El volumen de hombres y, sobre todo, de transexuales --principalmente procedentes de Brasil-- que se prostituyen en Mallorca registró un incremento en los últimos tres años, que va parejo al que se viene produciendo en toda España, aunque se trata también de los colectivos "más difíciles de alcanzar" por Médicos del Mundo, al parecer, a causa del rechazo social que perciben.

MÁS PISOS CLANDESTINOS

Por otra parte, Francisca Ramírez descartó que se esté produciendo un descenso en el número de prostíbulos en Mallorca, aunque si manifestó que se percibe un repunte de los pisos clandestinos, donde pequeños grupos de entre 3 y 4 personas ejercen la prostitución hasta que abandonan el lugar después de unos meses por las quejas vecinales, siempre para establecerse en otro similar.

Concretamente, según el estudio correspondiente a 2008 últimado por esta experta, sobre datos de 750 personas atendidas, 305 trabajan en casas o pisos clandestinos, 233 en clubs, 192 en plena calle y 20 en otros lugares; siendo 679 de ellas mujeres, 45 hombres y 26 transexuales. Así, la vivienda es el principal lugar donde se ejerce, con el 40 por ciento de los casos, seguido del club, con el 31%.

Cabe señalar que Médicos del Mundo, que considera la prostitución un tipo de violencia de género y mantiene un posicionamiento "abolicionista" ante esta práctica, afirma que las mujeres que se han visto involucradas en esa actividad arrastran posteriormente problemas de afectividad, 'síndrome de Estocolmo' y 'estrés post traumático', entre otras cuestiones.

SECUELAS PSÍQUICAS Y ADICCIONES

Estas secuelas psíquicas se están manifestando de una manera más acentuada entre quienes vuelven ahora a la prostitución, que además vuelven a sentir la "estigmatización" que supone su dedicación. Al mismo tiempo, quedan expuesta a recaer en las adicciones a alcohol y drogas --sobre todo cocaína-- características de esta actividad; como también lo son los trastornos del sueño y de la alimentación.

Desde el Centro de Atención Sociosanitaria a Personas que Ejercen la Prostitución, la ONG ofrece atención médica a personas que ejercen en esta actividad en aspectos como el control ginecológico, la prevención, diagnóstico y tratamiento de ETS y la promoción y educación de la salud.