Jaume Sanllorente: "La crisis tal vez es un golpe que necesitábamos para aprender valores que, ni se venden ni se compra

Jaume Sanllorente
Foto: EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 24 febrero 2012 21:28

"Que me sigan diciendo loco, pero 6.000 personas tienen un futuro mejor"

   PALMA DE MALLORCA, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

   El fundador y actual director general de la ONG Sonrisas de Bombay, Jaume Sanllorente, ha explicado este viernes su experiencia personal al frente de esta entidad y ha admitido que desde que hace ocho años, cuando decidió dejar lo que era hasta ese momento su vida y trasladarse a la India, ha pasado por momentos muy complicados pero en los que también ha "aprendido muchas cosas".

   En este sentido, se ha referido a la actual crisis y, tras admitir que es un gran problema, ha remarcado que "a veces, nos deben faltar unas cosas para aprender otras". "Es un golpe que necesitábamos para aprender otros valores que ni se venden, ni se compran, ni se especulan con dinero".

   Durante una conferencia en el congreso 'Lo que de verdad importa', celebrado en Palma, Sanllorente ha narrado cómo fue ese cambio en el que pasó de trabajar en Barcelona en una revista económica entre semana y en un local de ocio los fines de semana, a fundar una ONG en Bombay, la capital financiera de India que visitó un verano prácticamente por casualidad.

VIVIR POR, PARA Y CON LOS DEMÁS

   "Un día hace ocho años descubrí que lo que me daba la felicidad y quería que fuese mi modus vivendi era vivir por, para y con los demás", ha indicado Jaume, quien, además, ha concretado que su decisión fue motivada al conocer un orfanato "con 40 ángeles" que estaba a punto de cerrar sus puertas por motivos económicos.

   Fue entonces cuando el periodista catalán optó por "volver a Barcelona, vender mi piso, dejar mi trabajo y regresar a Bombay con dinero para que el orfanato pudiera seguir adelante". "Lo tuve muy claro, no sé por qué lo hice", ha admitido Jaume Sanllorente, que ha explicado que es como "cuando alguien se enamora a primera vista".

   "Que me sigan diciendo loco, pero 6.000 personas tienen un futuro mejor", ha manifestado sobre su valiente determinación y las consecuencias positivas que ésta ha tenido y continúa teniendo para muchas personas de esta ciudad india.

   No obstante, una vez allí, según ha reconocido, pasó por muchos momentos complicados que le hicieron llegar a pensar en "tirar la toalla". De hecho, incluso tuvo que vivir con escolta a consecuencia de las amenazas y ataques de algunas de las mafias, molestas con él por velar por el futuro de los niños de los que ellos se aprovechaban.

"MI JEFE SON LOS POBRES DE BOMBAY"

   Jaume ha recordado también un episodio que vivió en una fiesta a la que acudió con la esperanza de recaudar fondos para su solidario cometido y donde le preguntaron por el nombre de su jefe. "Mi jefe son los pobres de Bombay", le contestó, lo que ocasionó las numerosas "bromas desagradables" por parte de su interlocutor como que "le pagaban una miseria" y provocó que Jaume permaneciese "serio expresamente".

   Sin embargo, al final de la cena le interrogaron sobre los motivos de su seriedad. "He dicho que mis jefes me pagan una miseria y me pagan con sonrisas, si a usted una sonrisa le parece una miseria, no le voy a ofrecer miserias en su cena". Al día siguiente, esta persona le envió una tarjeta pidiendo disculpas y ayuda con la que pudo adquirir ropa para todo un año para los niños del orfanato.

   A pesar de todo, Jaume asegura no ser "ni más ni menos extraordinario que todas y cada una de las personas sentadas aquí", ha dicho ante su auditorio. Según su opinión, "todos podemos hacer algo, no hace falta irse a la India". En este sentido, ha recomendado a los asistentes que vivan "para los demás" de manera que cada día se vayan a dormir pensando en que han alegrado el día a alguien.

"SI QUERÉIS VIVIR EN UN JARDÍN BONITO, PLANTAD VOSOTROS LAS FLORES"

   Según su opinión, hay que ser "como un violín" que cuando tiene un "valor y significado es cuando regala música a otra persona. Vuestra función es regalar a los demás", ha comparado el fundador de Sonrisas de Bombay, que ha lamentado que en muchas ocasiones las personas olviden que el mundo "es como un jardín". "Si queréis vivir en un jardín bonito, plantad vosotros las flores".