PALMA DE MALLORCA, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans (SEPC), que se encerrará la noche de este miércoles en el edificio Ramon Llull de la Universitat de les Illes Baleares (UIB), llevará a cabo una huelga y una manifestación este jueves para conseguir una "universidad pública gratuita, de calidad y en catalán" y posicionarse en contra de la "prepotencia" de la Conselleria de Educación, Cultura y Universidades y del Govern y de los recortes del Ejecutivo central.
Según explican en su convocatoria, la huelga tendrá lugar durante todo el jueves y la manifestación se llevará a cabo a las 12.00 horas del mismo día en la plaza del Tubo, frente a los institutos de Avenidas.
Así, señalan que el presidente del Govern, José Ramón Bauzá, aplica, por "órdenes" de Madrid, "leyes represivas a golpe de decreto y pone en marcha toda su maquinaria propagandística para deslegitimar y 'depurar', en terminología franquista, a los maestros disidentes".
De esta manera, aseguran que "desde la dignidad rebelde", convocan una jornada de huelga estudiantil para demostrar que, "a pesar de la ofensiva imperialista y capitalista en Mallorca", el SEPC sigue "resistiendo" y no se detendrá hasta conseguir sus objetivos.
El parón del SEPC se ha convocado en unas 26 ciudades del territorio de habla catalana, como Palma (Baleares), Barcelona, València, Gandia, Castelló y Xàtiva (Comunidad Valenciana), Girona, Olot, Figueres (Girona), Terrassa, Molins de Rei, Manresa, Vic, Vilafranca del Penedès (Barcelona), Cervera (Lleida), Tarragona, Reus, Torredembarra (Tarragona), entre otras.
Con esta huelga, los organizadores quieren llevar a la calle de forma unitaria el proceso de reflexión y la lucha que están realizando de forma local las asambleas de estudiantes a consecuencia del plan Bolonia y del Horizonte 2020, por lo que la huelga es "un punto de inflexión y no de culminación".
Además de protestar contra el modelo imperante, han definido cuatro reivindicaciones que trabajarán en las asambleas: el fraccionamiento del pago de la matrícula; la obtención o la ampliación de un fondo de becas propio de la universidad para compensar la subida de tasas; la remuneración de las prácticas curriculares o la gratuidad de las mismas, y una mayor y digna oferta de másters públicos en todos los centros.
