MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
Si no hay sorpresas, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, pondrá hoy martes una fecha para el referéndum que había anunciado sobre la 'iniciativa de los presos', que prevé la creación de dos estados como solución al conflicto con Israel. Abbas, que ha adoptado esta decisión ante la falta de acuerdo entre el grupo islámico Hamas y el nacionalista Al Fatah, se reunió con el alto representante para la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) de la Unión Europea, Javier Solana. Éste garantizó que Europa seguirá apoyando económicamente a Palestina.
No hay acuerdo entre Hamás y Al Fatah, y Abbas será consecuente con el ultimátum de diez días que dio para aceptar la llamada 'iniciativa de los presos'. "El que quiera enmendar el documento, no obtendrá ningún resultado, sentenció el presidente palestino, contrario a modificar la propuesta Esta propuesta, diseñada por destacados representantes de los dos colectivos encarcelados en prisiones de Israel, prevé la creación de los dos estados como solución al conflicto.
A Hamás no le ha hecho gracia la advertencia de Abbas. "Sentimos que el acercamiento es imponernos el documento. El acercamiento es tratar este documento como sagrado y eso es algo que no podemos aceptar", aseguró Sami Abu Zuhri, portavoz de Hamás. Aunque el grupo islámico está dispuesto a continuar con las negociaciones, no comparte la fecha límite impuesta por Abbas ni tampoco la solución del referéndum. "No vamos a aceptarlo", sentenció.
El objetivo de Abbas es que la población de Gaza y Cisjordania se pronuncie sobre el establecimiento de un futuro Estado palestino con las fronteras anteriores a 1967 por medio de un referéndum que no tiene precedentes históricos. Llegar a ese referéndum reforzaría la figura de Abbas en un Gobierno palestino que domina Hamás. "Le daría poder para continuar con las negociaciones con Israel", dijo Azam al-Ahmad, dirigente de Al Fatah.
Javier Solana, en todo caso, garantizó la ayuda europea a Palestina. "La UE sigue siendo el principal donante de los palestinos y se está dando más dinero en 2006 que en 2005", dijo el alto representante para la Política Exterior en la rueda de prensa conjunta con Abbas. "No abandonaremos a los palestinos", garantizó.
Estas declaraciones se producen tras la decisión tanto de la UE como de Estados Unidos de suspender su ayuda, que asciende a cientos de millones de dólares, tras la formación del nuevo Gobierno. El motivo, que ambas administraciones siguen considerando a Hamás un grupo terrorista.
Solana aseguró que la UE está elaborando todavía el mecanismo para que la ayuda humanitaria pueda llegar a los ciudadanos palestinos sin necesidad de pasar por el Gobierno liderado por Hamas. También se comprometió a hablar con Israel para garantizar que los principales puntos de paso en la franja de Gaza funcionen mejor. Las autoridades israelíes suelen cerrar estos puntos, principal puerta para el comercio palestino, por motivos de seguridad.
INCIDENTES
La tensa situación política tiene su reflejo en los incidentes que se produjeron a lo largo de la jornada. Un grupo de unas 30 personas asaltaron la sede del Banco Árabe en Gaza para reclamar los salarios que les ha prometido el Gobierno palestino. En concreto, el Ejecutivo se había comprometido a pagar este lunes a 40.000 funcionarios, los primeros en tres meses, pero el dinero disponible no era suficiente para cumplir ese compromiso. Sólo unos 10.000 clientes del Banco de Palestina cobraron. Los asaltantes lanzaron gritos contra el director de la sucursal y lanzaron agua en su despacho. La Policía les desalojó y el banco cerró sus puertas.
Al sur de la franja de Gaza, unos quince milicianos de Hamás irrumpieron en un edificio de una televisión palestina, expulsaron a los trabajadores del edificio y destrozaron material. Los empleados afirmaron que se produjeron varios disparos al aire. "Sois colaboradores, sois parciales, sois gente sucia", gritaron los asaltantes a los empleados mientras les golpeaban para sacarles del edificio. Otro miliciano de Hamás murió en una explosión en la localidad de Jabaliya, en el norte de la franja de Gaza y dos personas más, una de ellas su hijo de ocho años, resultaron heridos.
El Ejército israelí ha negado cualquier implicación en los hechos.
