KANDAHAR (AFGANISTÁN), 13 Ago. (EP/AP) -
El rehén alemán Rudolf Blechschmidt aseguró hoy en una conversación telefónica que realizó un presunto miliciano talibán a la agencia AP que está enfermo y advirtió de que sus captores han amenazado de nuevo con matarle.
El secuestrado se identificó, con la voz entrecortada y haciendo grandes pausas, se identificó a la agencia como Rudolf Blechschmidt y pidió a la misma trasladar un mensaje a la Embajada alemana y a su hijo Markus.
Previamente, un presunto talibán realizó la llamada y puso a Blechschmidt al teléfono. El ingeniero alemán solicitó a los Gobiernos afgano y germano que intenten resolver su caso e incidió en que los talibán quieren dialogar al respecto con funcionarios afganos en Kabul.
Se trata de la primera pista que confirma que el ciudadano alemán, en cautiverio desde el mes pasado, sigue todavía con vida. "Vivo con los talibán en la montaña, estoy en peligro y estoy muy enfermo", aseguró en inglés. "Los talibán quieren matarme", advirtió.
En las últimas semanas, los talibán han ofrecido entrevistas con los rehenes extranjeros que mantienen secuestrados en un intento por presionar a la opinión pública y, con ella, a los Ejecutivos afgano y norteamericano para que éstos liberen a varios de sus correligionarios presos.
Blechschmidt --que hasta ahora sólo había sido identificado por los medios germanos como Rudolf B-- es uno de los dos ingenieros alemanes secuestrados el pasado 18 de julio por los talibán en la provincia de Wardak. El otro alemán, Ruediger Diedrich, de 43 años, fue hallado muerto con heridas de bala en su cuerpo el pasado 21 de julio.
El mensaje de Blechschmidt se conoce horas después de la liberación de dos mujeres surcoreanas en la provincia de Ghazni por los talibán, después de negociar éstos con las autoridades surcoreanas. Otros 19 surcoreanos, todos ellos voluntarios cristianos, permanecen aún retenidos por la milicia.
