MADRID, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
El número de fallecidos por el temporal de frío y las espesas nieves caídas en varias provincias afganas en las últimas semanas ha superado los 300, mientras que decenas de personas han resultado heridas por los mismos motivos, según los datos facilitados hoy por la Autoridad Nacional para la Gestión de Desastres de Afganistán (ANDMA).
La mayoría de las víctimas son niños y mayores, pues son especialmente vulnerables a las enfermedades invernales como la neumonía y otras infecciones respiratorias. De las 25 provincias afectadas por el temporal --hay 34 en el país--, Herat, en el oeste, ha sido la que se ha llevado peor parte con 137 muertes y 41.000 cabezas de ganado desaparecidas, informó la agencia de noticias de la ONU, IRIN.
En las provincias vecinas de Fará, Badghis y Ghor, han muerto unas 125 personas y muchas otras han contraído enfermedades por el frío. El director de ANDMA en Kabul, Abdul Matin Edrak, declaró que "puede que aumente el saldo de muertos porque estamos en medio del severo invierno".
Apoyado por agencias de la ONU y de la OTAN y otras organizaciones internacionales, el Gobierno de Afganistán ha enviado suministros de ayuda a muchas de las comunidades afectadas. La Policía y el Ejército también han ayudado en algunas operaciones de evacuación y distribución.
A pesar de esto, muchas familias de las provincias más castigadas por las extremas condiciones meteorológicas se han quejado por la escasez de respuesta humanitaria y pidieron asistencia urgente.
Los informes recibidos por la ANDMA en Kabul y llegados desde diversos puntos del país, indican que más de 83.000 animales de granja murieron el mes pasado, lo que, según el experto del Ministerio de Agricultura Ghulam Jailani Rasoli, habría afectado a cerca de 1.000 familias de granjeros. Rasoli añadió que la dependencia de muchas familias de este tipo de recursos animales podría colocarlas en una situación de profunda vulnerabilidad e inseguridad alimentaria.
