Alemania.- Alemania investiga una fosa común del régimen nazi en la que habría niños víctimas de eutanasia

Actualizado: viernes, 6 octubre 2006 21:40

BERLIN, 6 Oct. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Rosa Aranda) -

Las autoridades alemanas están estudiando una fosa común en Mende, en el oeste de Alemania, que se remonta a la época de la Segunda Guerra Mundial y en la que se encontraron 51 cadáveres, entre ellos, los de 22 niños víctimas de una campaña secreta de eutanasia del régimen de Hitler, que comenzó en 1939 y perduró hasta 1941.

Para llevar a cabo dicha investigación las autoridades alemanas están topándose con varias dificultades, pues son muy escasos los testigos de aquella época que aún están en condiciones psíquicas de acordarse de lo ocurrido hace más de sesenta años.

"Mientras tengamos el más mínimo indicio de que los niños fueron víctimas del programa de eutanasia de Hitler, seguiremos las investigaciones", aseguró el fiscal del caso, Ulrich Maas.

Los expertos forenses llevan días removiendo los restos en una fosa encontrada junto a un cementerio católico en la que se han encontrado cincuenta y un cadáveres, pero en la que se estima que podría haber hasta 200 cuerpos.

Los resultados obtenidos hasta el momento apuntan a que algunos de los niños, con edades comprendidas entre 1 y 7 años, podrían haber sufrido trastornos o deficiencias psíquicas, asociadas al síndrome de Down, explicaron los forenses a medios alemanes.

Maas anunció que ha abierto 22 casos de investigación por asesinato. De momento se está barajando la posibilidad de que los otros 29 cuerpos pudieran haber sido resultado de las bombas aliadas durante la Segunda Guerra Mundial.

Según datos del Museo estadounidense del Holocausto, alrededor de 200.000 personas murieron en manos de los nazis como parte del programa de eutanasia que se aplicó en toda Europa para la "depuración de la raza germana".

Los historiadores alemanes apuntan a que entre 1939 y 1941 alrededor de 70.000 personas "no consideradas dignas de vivir", enfermos mentales, niños o personas con discapacidades fueron asesinados por el programa secreto de eutanasia del régimen nazi con gas o inyecciones letales. A los familiares se les enviaba entonces un certificado de defunción o una urna con las cenizas del asesinado.