BERLÍN, 22 Dic. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Rosa Aranda) -
La Fiscalía de Munich, encargada del caso de corrupción de Siemens, ha suspendido los autos de prisión preventiva que aún pesaban sobre cinco empleados y ex empleados del grupo, sospechosos de desfalco de fondos para sobornar a clientes, tras haber concluido los interrogatorios.
Sin embargo, tras las declaraciones de los implicados en el caso se han incrementado las sospechas de fraude, aseguró esta tarde Christian Schmidt-Sommerfel, fiscal jefe del caso.
El detenido de más rango en Siemens es Thomas Ganswindt, ex director del departamento de comunicaciones de la compañía, quien fue informado desde principios de 2004 de la existencia de cuentas secretas para el desfalco y los sobornos de Siemens y pese a ello, siguió tolerando estas irregularidades.
Pese a que los interrogatorios han finalizado, la Fiscalía de Munich seguirá investigando el caso de Siemens, cuyos empleados habrían desviado alrededor de 200 millones de euros, (420 millones según las investigaciones internas de Siemens), a cuentas de países como Austria y Suiza, para emplearlos después para sobornos a posibles clientes.
Schmidt-Sommerfeld analizará durante las próximas semanas las declaraciones de los sospechosos y el material requisado tanto en las oficinas de Siemens como en las viviendas de algunos de sus directivos.
