RIAD, 4 Feb. (Reuters/EP) -
El fiscal público de Arabia Saudí, Saud al Moyeb, ha anunciado este lunes su intención de revisar el sistema del 'mehram' o guardián masculino que se impone a toda mujer en Arabia Saudí para evitar abusos del mismo.
Al Moyeb ha anunciado que "no escatimaremos esfuerzos para proteger a los individuos, sean hombres, menores o padres de posibles tratos injustos por parte de quienes abusan de sus poderes como guardianes", ha afirmado en declaraciones recogidas por el periódico en inglés 'Saudi Gazette'.
El fiscal ha asegurado que se han recibido escasas denuncias con respecto al sistema de custodia, pero no ha dado ningún tipo de cifra concreta.
El anuncio se produce después de la repercusión que tuvo el caso de una mujer de 18 años que viajó a Tailandia el mes pasado. Rafá Mohamed estaba de vacaciones con su familia en Kuwait y huyó a Bangkok. Desde allí publicó una petición de ayuda a través de Internet. En un primer momento las autoridades tailandesas aceptaron repatriar a la mujer, pero finalmente dieron marcha atrás y se le concedió asilo en Canadá.
Toda mujer saudí tiene un 'mehram' asignado, un familiar hombre que suele ser el padre o marido, pero que también es en ocasiones un tío, un hermano o incluso un hijo. El guardián debe dar su autorización para que la mujer se case, se saque el pasaporte o viaje al extranjero.
Los grupos de defensa de los Derechos Humanos denuncian que se trata de una norma que convierte a las mujeres en ciudadanas de segunda categoría, les priva de libertades sociales y económicas y las hace así más vulnerables a la violencia.
La Policía y los jueces saudíes no cuentan con un sistema legal formal más allá de la 'sharia' o Ley Islámica, por lo que se suelen amparar en la costumbre para aplicar prohibiciones a las mujeres. De hecho, la gran mayoría del sistema del 'mehram' se basa en prácticas informales y no en leyes concretas.
Las reformas implantadas por el príncipe heredero, Mohamed bin Salmán, habilitan a las mujeres para conducir y rebajan las condiciones para las relaciones sociales entre ambos sexos. Incluso se expresó en 2018 a favor de abolir el sistema del 'mehram'. Sin embargo, a día de hoy sigue en vigor, se sigue persiguiendo a la disidencia y han sido detenidas y presuntamente torturadas varias activistas de los derechos de las mujeres.
