MANILA, 26 Nov. (Reuters/EP) -
Las fuerzas de seguridad filipinas lanzaron hoy jueves dos operativos en ciudades del sur del país y detuvieron al menos a 20 sospechosos por su relación con la muerte el pasado lunes de 57 que fueron asesinadas en una acción aparentemente relacionada con las disputas electorales entre dos importantes clanes locales.
Los soldados que tomaron parte de este despliegue también desarticularon una milicia paramilitar controlada por una poderosa familia de la región, según informó el portavoz del Ejército, el teniente coronel Romeo Brawner.
El gobernador provincial de Maguindanao, Andal Ampatuan, no puede presentarse a su reelección pero quiere que su hijo, el alcalde de Datu Unsay Andal Ampatuan Jr., le suceda en el cargo, lo que presuntamente habría provocado la masacre.
Las autoridades quieren aclarar precisamente la implicación del potencial sucesor al cargo de gobernador, por lo que esperan que Andal Ampatuan Jr se entregue "pacíficamente" a lo largo del día. Algunos testigos citados por los periódicos locales le sitúan en el lugar de los crímenes cuando éstos ocurrieron.
En este sentido, el jefe de la Policía nacional, Jesús Verzosa, apuntó que, por lo que se sabe, Andal Ampatuan Jr. "es un sospechoso".
Los equipos forenses llevan días trabajando para tratar de identificar a todas las víctimas, aunque se sospecha que al menos 22 de ellas eran periodistas. La emboscada del pasado lunes habría sido llevada a cabo por alrededor de un centenar de hombres armados que trasladaron a las víctimas hasta una zona remota para atacarles con rifles M-16 y machetes.
