ASEM.- Zapatero hace hincapié en que el terrorismo es "infamia y barbarie, no política o ideología"

Actualizado: domingo, 10 septiembre 2006 18:27

Apoya, en alusión a las cárceles secretas de la CIA, medidas "eficaces pero también serenas" contra el terrorismo

HELSINKI, 10 Sep. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, Antonio Rodríguez) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, hizo hoy hincapié a los mandatarios que participan en la Cumbre ASEM en que el terrorismo es "infamia y barbarie, no política o ideología" y que "sólo la acción política puede resolver los conflictos".

Zapatero subrayó que el terrorismo global es hoy una amenaza para todos que varios de los países presentes en la reunión, caso de España, han sufrido "en carne propia" hasta ahora. "No hay causa alguna que justifique el terrorismo. Ninguna idea, por legítima que sea, puede servir de coartada para el asesinato indiscriminado. El terrorismo sólo es infamia y barbarie, no es política o ideología. (...). El terror sólo agrava los conflictos, retrasando y dificultando las soluciones", indicó en una intervención en la que no se refirió al proceso de paz en el País Vasco.

El jefe del Ejecutivo instó a los jefes de Estado y de Gobierno europeos y asiáticos a encontrar respuestas al complejo problema del terrorismo global que sean "eficaces pero también serenas", en alusión al reciente reconocimiento por parte del presidente estadounidense, George W. Bush, de que la agencia norteamericana CIA cuenta con cárceles secretas.

Estas respuestas sólo pueden encontrarse, en su opinión, en los valores "que dignifican la vida en común como son la libertad, los derechos humanos, las relaciones justas entre los pueblos, el progreso compartido y la solidaridad".

El presidente del Gobierno dejó claro que los Ejecutivos están "obligados" a proteger a sus ciudadanos de la amenaza terrorista. "Debemos afrontar la amenaza en toda su complejidad, en todas sus dimensiones, desde un consenso político asentado sobre los pilares del multilateralismo efectivos, la cooperación internacional y la defensa de la legalidad y el respeto de los derechos humanos", explicó.

En este sentido, estimó necesario que se refuerce el marco institucional de Naciones Unidas para que este organismo pueda asumir el liderazgo contra el terrorismo que les corresponde y celebró que la Asamblea General de la ONU acabe de respaldar la Estrategia Global contra el Terrorismo a propuesta del secretario general, Kofi Annan. "Debemos ahora concluir urgentemente la Convención Global contra el Terrorismo y la Convención contra el Terrorismo Nuclear", añadió.

En línea con lo solicitado por España en los últimos años en Nueva York, Zapatero subrayó que es preciso establecer un fondo internacional que asista económicamente a los Estados con menos recursos, para que así puedan cumplir con sus obligaciones internacionales contra el terror.

"Hay que tener debidamente en cuenta a las víctimas, que merecen la definición de mecanismos concretos a través de los que podamos transmitirles toda nuestra solidaridad y apoyo", manifestó a el resto de homólogos europeos y asiáticos.

NO PONER BAJO SOSPECHA A UNA SOCIEDAD ENTERA.

Asimismo, dejó claro que el terrorismo "persigue la imposición de ideas por la violencia y la derrota de la democracia", siendo la "negación absoluta" de los valores que sustentan la dignidad humana. "Ha sido utilizado históricamente en apoyo de diferentes ideologías o confesiones religiosas. Por ello no podemos vincularlo con ninguna civilización, cultura o religión determinada. Sería un grave error poner bajo sospecha de complicidad a sociedades o colectividades enteras. Un grave error que sólo conduciría a la incomprensión entre culturas, y a más odio y más violencia", señaló.

El presidente del Gobierno resaltó que para vencer al terrorismo se tiene también que hacer un "esfuerzo cabal de comprensión de la amenaza", con el fin de "analizar y reflexionar" sobre cuáles son las condiciones que "posibilitan la extensión del fanatismo y el apoyo a la estrategia del terror".

Zapatero recordó que España y Turquía copatrocinan la iniciativa de la Alianza de Civilizaciones para, entre otros objetivos, superar el distanciamiento con el mundo islámico. "Vamos a velar por la puesta en práctica del plan de acción, con la determinación de que la Alianza de Civilizaciones se convierta más pronto que tarde en una realidad tangible, y que no se quede en una iniciativa diplomática de buenas intenciones", aseveró.

"Aceleremos las decisiones que nos llevarán a un mundo justo y seguro; fortalezcamos Naciones Unidas, el multilateralismo y la legalidad internacional; cumplamos también los Objetivos del Milenio para la erradicación de la pobreza y la miseria; y construyamos conjuntamente una verdadera Alianza de Civilizaciones", concluyó Zapatero.