MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
El balance de muertos a causa del ataque ejecutado el domingo contra los talibán contra el cuartel general de la Policía de Afganistán en la provincia de Baghlan (norte) ha ascendido a 20, entre ellos 18 agentes.
El ataque fue perpetrado en la sede de la Policía en la provincia, ubicada en la ciudad de Pul-e-Jumri, cuando uno de los talibán activó la carga explosiva que transportaba en un 4x4 a las puertas de la sede.
A continuación, siete insurgentes irrumpieron a tiros en la sede policial, desencadenando un enfrentamiento que se saldó seis horas después con la muerte de todos los atacantes. El ataque dejó además 60 heridos, entre ellos varios niños
El presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, ha condenado el "atroz crimen" y el primer ministro, Abdulá Abdulá, ha recalcado que el ataque "revela la verdad de que esta red criminal no tiene causa ni convicciones, más allá del deseo vándalo de violencia y destrucción", según ha informado la cadena de televisión afgana Tolo TV.
El propio Ghani ha reclamado este mismo lunes a los talibán que respondan "a la petición de paz y reconciliación" por parte de la población del país, tras la gran asamblea por la paz celebrada la semana pasada.
"Pido nuevamente a los talibán que respeten este sagrado mes", ha dicho, en un mensaje publicado con motivo del Ramadán, en el que ha recalcado que las conclusiones de la citada 'yirga' "serán gran parte de la política de paz del Gobierno".
El mandatario afgano dijo el viernes estar preparado a declarar un alto el fuego total durante el Ramadán siguiendo los consejos de la recién terminada 'Gran asamblea' de la paz, y siempre y cuando los talibán "se muestren igualmente receptivos".
Asimismo y como gesto de buena voluntad, anunció la próxima liberación de 175 prisioneros talibán e invitó a una delegación insurgente a Kabul o al lugar de su elección para recibirles.
Sin embargo, el portavoz de los insurgentes, Zabihulá Muyahid, publicó horas después un comunicado en su cuenta en la red social Twitter en el que criticó las conclusiones de la 'loya jirga' por la paz y denunció que la mayoría de sus participantes "colaboraron con la ocupación".
"Afganistán fue invadido por Estados Unidos (...) y la yihad es obligatoria", sostuvo, antes de descartar un alto el fuego durante el Ramadán y manifestar su respaldo a continuar las conversaciones de paz con Washington.
Muyahid dijo además que el enviado especial de Estados Unidos para Afganistán, Zalmay Khalilzad, "debería dejar de pedir a los talibán que dejen las armas y decir por contra a Estados Unidos que ponga fin al uso de la fuerza".
