LONDRES, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro británico, Tony Blair, valoró hoy que el terrorismo internacional no está formado por "gente desperada", sino que constituye un movimiento con "ideas y objetivos", en respuesta a las preguntas que cientos de personas le han enviado a través de la página web de Downing Street.
"Su objetivo es destruir la democracia. La única manera de luchar contra ellos es con el proceso democrático y con los iraquíes gobernándose ellos mismos", declaró, estimando que "es una gran responsabilidad tomar acciones militares".
Además, recordó que desde la caída de Sadam Husein ha habido una lucha continua contra "terroristas e insurgentes que quieren quebrantar un proceso democrático, porque están convencidos de que quieren parar este proceso". "Ni uno de los políticos con los que he hablado en Bagdad, todos elegidos democráticamente, me ha dicho que quería que volvieran los días de Sadam", anotó.
Una de las preguntas planteadas se refirió al hecho de que en Irak no se encontraron armas de destrucción masiva. "Ahora la gente puede leer los informes de Inteligencia que me presentaron y en los que base mi decisión. Puede leer lo que yo recibí y pensar lo que ellos harían", declaró.
Sobre las últimas redadas de la Policía antiterrorista realizadas en Londres y en las que dos personas fueron detenidas y una de ella recibió un disparo en el hombro, Blair dijo que las apoyaba "al 101 por ciento". "Si tienen (los servicios de Inteligencia) información que creen que es razonable, mi opinión es que es su obligación actuar", explicó.
"Es importante que a cada nivel se luche contra el terrorismo, ya que esta es una amenaza que es real y está en todas partes del mundo.
Hay que ser precisos, pero hay que tomar precauciones", indicó.
En su opinión, el nuevo terrorismo está "preparado para matar sin límite". El líder laborista comparó este terrorismo con el del IRA o el de los grupos lealistas en el Ulster, aunque reconoció que pese a que todas las formas de terrorismo son igualmente condenables, existe una diferencia. "Mataron a 3.000 personas en Nueva York, a 200 en Madrid y a más de 50 en Londres, pero si lo hubieran podido multiplicar por 10 lo hubieran hecho", consideró.
MEDIDAS ANTISOCIALES
Blair se refirió también a las críticas recibidas por las nuevas leyes antisociales que ha puesto en marcha su Gobierno. Según el primer ministro, las medidas antisociales han supuesto dar nuevos poderes a la Justicia y nuevos medios a la Policía para tratar de acabar "con esta falta de respeto generalizada".
"Pueden decir que estas leyes son contrarias a las libertades civiles, pero no le pidan a los políticos que lo solucionen porque no se puede hacer sin las actuales leyes. Lo frustrante para mí es que la gente me preguntaba porqué no se hacían cosas para que hubiera leyes, para que hubiera orden y cuando las presenté en el Parlamento, la gente me criticaba", apostilló.
Por otra parte, Blair se negó a poner fecha a su retirada y a decir si el viceprimer ministro, John Prescott, abandonará su puesto cuando lo haga él. "El trabajo de uno mientras dure es hacer lo mejor para el país y tomar las decisiones correctas", afirmó.
Respecto a las acusaciones de acoso sexual publicadas en la prensa británica contra Prescott, Blair valoró: "Si alguien ha hecho algo malo debería pagar por ello, pero no hay que asumir que alguien ha hecho algo malo porque ha salido en el periódico. No se debe asumir que se han hecho cosas sólo porque haya gente que ha hecho acusaciones".
Finalmente, cuestionado sobre las bases de su política, el líder laborista dejó claro que su política está basada "en que cada persona debe tener las máximas oportunidades en la vida sin tenerse en cuenta su clase social, raza o religión y eso se tiene que ajustar con que todos actuemos de forma responsable". "Nuestro objetivo es crear oportunidades para la gente, pero la única forma de que funcione es que estas oportunidades estén acompañadas de responsabilidades", consideró.
