Un bomba escondida en un tanque con gas clorina mata a nueve personas y hiere a otras 150 en el norte de Bagdad

Actualizado: martes, 20 febrero 2007 23:45


BAGDAD, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

Una bomba escondida en un tanque cisterna que transportaba gas clorina mató hoy a nueve personas e hirió a otras 150 en el norte de Bagdad, aquejadas de una intoxicación de gas nocivo, entre ellas muchos menores de escuelas cercanas.

Por su parte, un portavoz del Ejército iraquí, el general Qassim Moussawi, explicó que el explosivo fue colocado en la parte baja del camión cisterna aunque no pudo precisar si éste fue accionado por control remoto o si llevaba un sincronizador incorporado, después de que anteriores informaciones apuntaran a que una bomba supuestamente colocada al borde de la carretera explotara al paso del camión cerca de Taji, 20 kilómetros al noroeste de Bagdad.

Por su parte, los hospitales cercanos tuvieron que atender a más de un centenar de heridos, aquejados por intoxicación, mientras muchos otros presentaban cuadros de shock y de ansiedad. Muchos de los heridos eran menores que se quejaban de sufrir problemas respitarorios, vómitos y escozor en los ojos. La mayoría de ellos fueron dados de alta pocas horas después de su ingreso sin que revistieran gravedad, explicaron fuentes hospitalarias.

Una baja explosición al gas clorina puede irritar los ojos, la piel y el sistema respiratorio, mientras que su inhalación en altas dosis puede llegar hasta encharcar de líquido los pulmones, incluso hasta provocar la muerte, según fuentes del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades.

Las autoridades tienen que determinar todavía si este tipo de ataque terrorista es un hecho aislado o por el contrario podría responder a una nueva táctica empleada por milicianos insurgentes para extender el pánico entre la población utilizando armas químicas.

Desde el pasado domingo, al menos 100 personas han muerto en distintos ataques perpetrados en Bagdad, a pesar de la nueva estrategia de seguridad desplegada por el Ejecutivo iraquí en colaboración con las tropas estadounidenses que, de forma conjunta, han aumentado los registros a viviendas y vehículos, además de haber aumentado las patrullas y los puestos de control en la capital iraquí.