Bush pide diálogo en Irak para evitar una guerra civil entre suníes y chiíes

Actualizado: viernes, 24 febrero 2006 19:34


NUEVA YORK, 24 Feb. (EUROPA PRESS/Carlos López) -

El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, pidió hoy contención y tranquilidad a las partes enfrentadas en Irak tras el ataque contra el santuario chií de Samarra, con el objetivo de evitar una escalada de la violencia que pudiera desembocar en una guerra civil entre ambas confesiones que socavara el proceso democratizador del país.

Durante un encuentro celebrado en Washington con la Legión Americana, tras celebrar una reunión dedicada a Irak con el Consejo de Seguridad Nacional, Bush subrayó que se trata de "un momento decisivo" para el pueblo iraquí en el que los ciudadanos deberán elegir entre el camino a una guerra civil o elegir el camino de la democracia.

En su discurso el presidente norteamericano hizo una referencia al líder religioso Ali al-Sistani a quien pidió su intervención para lograr calmar los ánimos entre sus seguidores. Los actos de violencia desatados tras el ataque contra la mezquita de Samarra han causado hasta el momento la muerte de doscientas personas.

"En los próximos días se vivirán momentos intensos ya que Irak se encuentra en una peligrosa situación", señaló Bush, a pesar de manifestarse "optimista" ya que "el pueblo de Irak se ha decantado" por su deseo de democracia como reflejó el resultado electoral. El presidente americano aseguró que las autoridades iraquíes investigan la autoría del ataque.

Para Bush el atentado contra la mezquita dorada fue "un ataque sin sentido y una afrenta al pueblo creyente de todo el mundo" y aseguró que haría "todo lo que estuviera en su poder" para ayudar a las autoridades iraquíes a esclarecer la autoría del ataque y conducir a sus responsables ante la justicia.

Por otra parte, George W. Bush acusó hoy al Gobierno de Teherán de ser uno de los principales precursores del terrorismo internacional, asegurando que no permitiría a Irán desarrollar armas nucleares que pudieran poner en riesgo la estabilidad en Oriente Próximo, recordando a los opositores al régimen que cuentan con el apoyo de Washington.

"A una sociedad opaca que es el primer promotor mundial del terrorismo no se le debe permitir poseer el arma más destructiva", señaló Bush durante su discurso ante el grupo de veteranos. "America seguirá enfrentándose a estas amenazas y el comportamiento agresivo de Irán y su deseo de poseer armas nucleares le aísla aún más", aseguró.

Bush subrayó que la comunidad internacional había enviado un claro mensaje a Teherán que contó únicamente en el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) con el apoyo de Siria, Cuba y Venezuela, y recalcó que continuarían luchando contra las ambiciones nucleares del Gobierno iraní.