KABUL, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente estadounidense, George W. Bush, prometió hoy durante su visita sorpresa a Afganistán que apoyará a la democracia emergente en este país y que Estados Unidos no interrumpirá su presencia militar y "se marchará" ante la creciente violencia que registra el país.
Asimismo, predijo que Osama bin Laden será capturado pese a que su búsqueda en estos cinco años ha sido inútil. "Confío en que será llevado ante la justicia", afirmó en rueda de prensa conjunta con su homólogo afgano, Hamid Karzai, a quien trató de expresar su apoyo.
Bush prometió que Bin Laden y otros de los cerebros de los atentados del 11-S serán detenidos. "No es cuestión de si son capturados y llevados ante la justicia, es cuestión de cuándo son llevados ante la justicia", subrayó.
Esta fue la primera visita presidencial a Afganistán desde que Estados Unidos derrotó al régimen talibán y lanzó su hasta ahora infructífera búsqueda de Bin Laden en la región. El líder de Al Qaeda se cree que está escondido en algún lugar en la zona montañosa entre Afganistán y Pakistán.
Bush, que sólo permaneció durante cuatro horas en Kabul, mantuvo un almuerzo de trabajo con Karzai y otros dirigentes afganos, asistió a una ceremonia en la Embajada estadounidense y se reunió con los soldados estadounidenses en la base de Bagram, al norte de Kabul.
"La gente de todo el mundo está observando la experiencia de Afganistán", destacó Bush, calificando a Karzai de "amigo y aliado".
Por su parte, el presidente afgano definió a Bush como "nuestro gran amigo, nuestro gran partidario, un hombre que nos ayudó a liberarnos".
Antes de abandonar Afganistán para dirigirse a India, próxima parada de su gira asiática, Bush mantuvo un breve encuentro con unos 500 soldados estadounidenses en Bagram, a los que habló sobre la misión de Washington en Afganistán. "Os aseguro que este vuestro Gobierno no cerrará los ojos, no se rendirá", Estados Unidos "no dejará todo y se irá", aseguró, en medio de los aplausos de los soldados.
