MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
Joshua Boyle, el ciudadano canadiense que estuvo secuestrado cinco años en Afganistán junto a su esposa, la estadounidense Caitlan Coleman, ha sido puesto en libertad bajo fianza este viernes a la espera de ir a juicio por presunta agresión sexual, entre otros delitos, según ha informado la cadena de televisión CBC.
El juez Robert Wadden ha ordenado la liberación de Boyle, que tendrá que pagar 10.000 dólares (6.617 euros) y residirá con sus padres en Smiths Falls bajo arresto domiciliario y con brazalete electrónico. Además, sus progenitores deberán pagar 10.000 dólares cada uno.
El ciudadano canadiense, que fue detenido en diciembre de 2017 y se enfrenta a cargos por 19 presuntos delitos, no tendrá acceso a Internet ni podrá comunicarse con víctimas ni familiares de las mismas, tal y como ha estipulado el juez, que ha ordenado a Boyle a entregar su pasaporte a las autoridades.
Boyle, de 34 años, Coleman y sus tres hijos fueron liberados en octubre, cinco años después de ser raptados mientras se encontraban de viaje en el país centroasiático. Sus hijos nacieron durante su cautiverio.
Tras su liberación, Boyle afirmó que los talibán que los mantenían retenidos violaron a su mujer y asesinaron a otra de sus hijas, nacida en cautividad.
"La estupidez y la maldad de la Red Haqqani por secuestrar a un peregrino y a su esposa embarazada que trabajaban para ayudar a los aldeanos solo puede ser eclipsada por la estupidez y maldad de autorizar el asesinato de mi hija bebé, la mártir Boyle, en represalia por mi repetida negativa a aceptar una oferta que me habían hecho los infieles criminales de la Red Haqqani", dijo.
Los talibán rechazaron las acusaciones de Boyle, asegurando que "desde que la pareja fue detenida y hasta su liberación, marido y mujer no fueron separados porque los muyahidín no querían levantar sospechas".
