PEKÍN, 8 Mar. (Reuters/EP) -
El ministro de Exteriores de China, Wang Yi, ha exhortado este sábado a todas las partes en Ucrania a la calma y la moderación con el fin de evitar que se exacerbe la tensión, con la península de Crimea como epicentro.
En una comparecencia de prensa en la sesión anual del Congreso Popular Nacional, el máximo órgano legislativo chino, Wang ha remarcado que las tensiones deben resolverse a través del diálogo y la vía política, según ha informado la agencia estatal de noticias china, Xinhua.
"Es lamentable que la situación en Ucrania haya llegado a estos extremos de hoy, aunque no ha sido por accidente", ha sostenido Wang, que ha aludido al intrincado entramado de intereses históricos como agravante en la coyuntura ucraniana.
"Cuanto más complejo es el problema, mayor es la necesidad de que se gestione de una forma prudente", ha argumentado el titular de Exteriores chino. "China está en contacto con las diversas partes y jugaremos el papel constructivo de China para alentar un acuerdo político", ha agregado.
Aunque Pekín no ha mostrado una gran implicación en el conflicto ucraniano ni en la ayuda financiera requerida por las nuevas autoridades para esquivar la bancarrota, Wang ha enfatizado que China tiene una "posición justa y objetiva", partidaria del diálogo y dispuesta a desarrollar una "cooperación amistosa" con Ucrania.
Esta postura se encuentra muy en la línea política plasmada por el Gobierno chino en la escena internacional, donde rehúsa pronunciarse de manera firme sobre asuntos que no le afectan directamente. En otros casos, como es Siria, se ha alineado con Rusia.
Un día antes, el portavoz el Ministerio, Qin Gang, había insistido en el llamamiento a todas las partes en el conflicto a "actuar en el marco de la ley y el orden, a resolver pacíficamente los asuntos relevantes a través del diálogo y la negociación, proteger exhaustivamente los derechos fundamentales e intereses de todas las comunidades étnicas en Ucrania, restaurar el orden social tan pronto como sea posible y mantener la paz y la estabilidad en la región".
En su comparecencia diaria, Qin expresó el rechazo de China al "uso o amenaza de sanciones" y ha señalado que Pekín espera que las "partes relevantes" desistan en sus intenciones de "adoptar acciones que van a acentuar las tensiones" para, en su defecto, buscar una "solución política" a la crisis.
"China se opone consistentemente al recurso fácil de las sanciones en las relaciones internacionales y al uso de las sanciones como amenaza", apostilló.
