MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) se ha mostrado "sumamente preocupado" por la "espiral de violencia" en la que ha entrado Ucrania y ha reclamado respeto para la labor de los equipos médicos y humanitarios que atienden a los damnificados por los choques entre manifestantes y fuerzas de seguridad.
El jefe de la delegación del CICR en la región, Pascal Cuttat, ha advertido en un comunicado de que numerosas personas necesitan ayuda médica "con urgencia" y, sin embargo, un voluntario de la Cruz Roja resultó herido este jueves "cuando prestaba asistencia médica".
"Hemos recibido otra información según la cual empleados y voluntarios de la Cruz Roja de Ucrania son objeto de asedios y otros impedimentos al realizar su labor", ha añadido, al referirse a unos actos de intimidación que ha tachado de "inaceptables".
Por este motivo, Cuttar ha instado a "todos los que participan en la violencia" a actuar con "moderación" y a mantener a los equipos e instalaciones médicas al margen de la violencia. No en vano, sólo en las últimas 48 horas, los equipos del CICR han prestado asistencia a más de 360 personas.
El CICR cuenta con personal sobre el terreno y mantiene contactos tanto con representantes del Gobierno como de la oposición. Cuttat ha subrayado que la labor de la organización es independiente de las discrepancias políticas.
