Clinton busca el apoyo de la clase obrera y arremete de nuevo contra el "elitismo" de Obama

Actualizado: lunes, 14 abril 2008 0:18
Foto de la Noticia
Foto: Reuters + Ampliar




   SCRANTON (PENNSYLVANIA, EEUU), 14 Abr. (Reuters/EP) -

   La precandidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos Hillary Clinton hizo ayer campaña en una pequeña ciudad del estado de Pennsylvania, Scranton.

Clinton pidió el voto de los trabajadores "blue collar" o trabajadores de mono y aprovechó de nuevo para arremeter contra su principal rival, Barack Obama, por sus últimas declaraciones contra los estadounidenses de las pequeñas ciudades de Pennsylvania.

   A sólo nueve días de las primarias del Partido Demócrata de Pennsylvania, Clinton caminó por uno de los barrios de Scranton, donde vivió cuando era niña y donde está enterrado su padre, para demostrar su cercanía con el votante de clase media.

   Clinton incidió de nuevo en el debate generado por los últimos comentarios de Obama, quien aseguró que la crisis económica y el paro ha propiciado que muchos de los habitantes de las pequeñas ciudades de Pennsylvania "se aferraran" a las armas, el odio al inmigrante o a la religión.

   "El senador Obama no admite lo que dijo ni asume la responsabilidad por ello. Lo que la gente quiere es una explicación", afirmó Clinton.

   "Se trata de cómo la gente ve al Partido Demócrata y a los líderes del Partido Demócrata. Hemos estado trabajando muy duro para dejar claro que tenemos millones de demócratas que van a la iglesia, poseen armas y están cansados de que los republicanos o, francamente, incluso nuestros propios demócratas, proporcionen munición a los republicanos", dijo.

   "Lo que ocurre entonces es que los republicanos aprovechan la situación", lamentó la ex primera dama y senadora por Nueva York.

   Sin embargo, el regreso de Clinton a Scranton coincide con una mala noticia para su campaña, ya que el diario local, el 'Scranton Times' dio hoy su respaldo a su rival, Obama.

   En su editorial, el diario reconoce que Clinton tiene "profundas raíces" en Scranton, pero la calificó de "pararrayos político". En cambio, aseguró que Obama tiene la capacidad de construir consensos.