Clinton lucha por evitar que Obama gane en New Hampshire y Romney critica con dureza a McCain

Actualizado: lunes, 7 enero 2008 0:11


MANCHESTER (EEUU), 6 Ene. (Reuters/EP) -

La senadora Hillary Clinton, con su espalda contra la pared en New Hampshire, salió este domingo a luchar por evitar que el estado se incline en favor de su principal rival, el senador por Illinois Barack Obama, en las primarias del Partido Demócrata para las elecciones presidenciales de Estados Unidos, mientras el republicano Mitt Romney criticó con dureza a su competidor John McCain.

Clinton exhibió una nueva y dura estrategia un día después de un debate donde se mostró frustrada porque, en su opinión, mientras Obama habla acerca de cambiar Estados Unidos, ella cree que ha sido quien realmente ha llevado a cabo el cambio. "Hay una gran diferencia entre hablar y actuar", comentó Clinton.

En New Hampshire está en juego el empuje crucial para este proceso y en ambos partidos la carrera está tomando un cariz negativo. Las primarias del martes son el siguiente campo de batalla en este proceso, que se realiza estado por estado, para elegir a los candidatos republicanos y demócratas para las elecciones de noviembre, que designarán al sucesor del presidente George W. Bush.

New Hampshire es vital para los esfuerzos de Clinton y Romney por revitalizar sus campañas después de sus decepcionantes desempeños en Iowa. Clinton, senadora por Nueva York y ex primera dama, busca ser la primera mujer en la presidencia de Estados Unidos. Romney, un acaudalado ex gobernador de Massachusetts, sería el primer presidente mormón del país.

Clinton tiene razones para estar preocupada. Obama, días después de vencer sólidamente en Iowa, dejando al ex candidato demócrata John Edwards en segundo lugar y a Clinton en tercero, está virtualmente empatado con Clinton en New Hampshire, de acuerdo a un sondeo de Reuters/C-SPAN/Zogby dado a conocer el domingo.

Los rivales republicanos Romney y McCain, quien venció a Bush en las primarias de New Hampshire en 2000, también están casi empatados, mientras la carrera a la Casa Blanca se hace más cerrada en ambos partidos.

La estratega de Clinton, Mandy Grunwald, apuntó a una nueva etapa más dura y aseguró que era hora de que la senadora se diferencie de Obama. "Estamos en una carrera dura y es hora de hacer algunas comparaciones", expresó Grunwald.

El riesgo que corre Clinton sería el de alejar a aquellos votantes que podrían ver la estrategia como de política negativa. La campaña de Edwards, haciendo notar la actuación de Clinton en el debate del canal de noticias ABC News del sábado, comentó en un correo electrónico: "El cambio ganó y el status quo perdió".

Mientras tanto, el republicano Romney necesita ganar o acabar entre los primeros en New Hampshire para mantener su credibilidad, y se ve amenazado por McCain, el senador de 71 años por Arizona que se enfrentó a Romney en el debate del sábado.

"El habla acerca de cambiar Washington. Pero ha estado demasiado tiempo, él tiene tantos 'lobbistas' como puede, él ha trabajado ahí demasiado tiempo (...) en muchos casos, él es un disidente dentro de su propio partido", aseguró Romney en referencia a McCain en el programa de televisión 'Fox News Sunday'.

McCain, que compite con Obama por captar a independientes, rechazó las acusaciones de Romney de que no ha sido partidario del cambio. "Nunca he sido elegido Miss Simpatía en el Senado, debido a que he intentado eliminar los gastos superfluos e innecesarios, he trabajado por la reforma de los fondos de la defensa, etcétera", indicó.