BRUSELAS, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha confirmado este jueves que el secretario general de la institución, Martin Selmayer, abandonará su cargo "a final de mes" y ha rechazado que ya se haya decidido su sucesor ante los rumanos en la prensa que apuntan a que el francés Olivier Guersent, podría asumirlo.
El nombramiento de Selmayer, que ejerció como jefe de gabinete del presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, y ha acumulado un enorme poder en la institución, fue muy polémico porque fue ascendido en el mismo día a vicesecretario general y nombrado secretario general en febrero de 2018.
Su continuidad en la Comisión hubiera sido muy complicada para la próxima presidenta de la institución, la también alemana Ursula von der Leyen, entre otros por la necesidad de respetar un cierto equilibrio geográfico en los altos cargos.
Juncker "ha aceptado" atender al "deseo del secretario general de ser relevado de su función a final de mes", un hecho del que informó al resto de comisarios en la reunión semanal del Ejecutivo comunitario este martes, ha explicado en rueda de prensa la portavoz de la Comisión, Mina Andreeva.
"Las consecuencias operativas de su salida se decidirán a lo largo de las próximas semanas", ha puntualizado.
La portavoz ha rechazado que su sucesor ya se haya elegido, al ser preguntada si ya se ha decidido que será un francés.
"La cuestión está absolutamente abierta", ha asegurado Andreeva, tras dejar claro que el cargo de secretario general "como ocurre con cualquier otro director general es nombrado por una decisión del colegio en su conjunto tras un proceso de selección exhaustivo" y debe cumplir una serie de cualificaciones.
Selmayer se encargaba además de forma central de las cuestiones relativas a la preparación para hacer frente a la eventualidad de un Brexit caótico, pero el Ejecutivo comunitario ha restado importancia su marcha desde esta perspectiva.
"El secretariado general es una máquina muy bien engrasada", ha recalcado la portavoz, insistiendo en que cuenta con un equipo "dedicado y trabajador" y por tanto "puede preparar y funcionar con la gente que está ahí" hasta el nombramiento de su sucesor.
El Ejecutivo comunitario, que siempre ha defendido que el nombramiento fue legal, justificó que no publicara el puesto a la Secretaría General y reasignara el puesto utilizando su margen de discreción "amplio" a fin de que no hubiera "ninguna interrupción" en el trabajo y alegó que Selmayer cumplía los requisitos para asumir el cargo, entre otros porque tenía "la confianza" de Juncker.
