KABUL, 24 Ene. (Reuters/EP) -
La comunidad internacional ha aceptado de buen grado la decisión de las autoridades afganas de retrasar cuatro meses las elecciones legislativas hasta el 18 de septiembre para asegurar la limpieza del proceso y despejar cualquier sombra de fraude como la que ha afectado gravemente a la reputación del presidente Hamid Karzai en los últimos comicios.
"Ha sido una decisión inteligente y pragmática que concederá el tiempo suficiente para reformar las esenciales instituciones que permitirán el desarrollo de unas elecciones parlamentarias más limpias", declararon fuentes diplomáticas bajo el anonimato.
Así, los comicios, previstos inicialmente para el 22 de mayo, han sido aplazados hasta después del verano, estación en la que se recrudecen los enfrentamientos contra los talibán.
La OTAN intentará aprovechar este plazo para reforzar la seguridad en el sur del país, donde los talibán impidieron a gran parte de la población acudir a las urnas en las últimas elecciones presidenciales, en las que más de un tercio de los votos depositados a favor de Karzai fueron anulados por fraudulentos.
Dentro de la reforma de las autoridades electorales, la comunidad internacional ha advertido, a través de las mencionadas fuentes, que no admitirá que Karzai reelija al polémico Azizulá Ludin al frente de la Comisión Electoral Independiente.
Ludin, cuyo mandato sobre el comité expiró el sábado, está acusado por la oposición de ser un partidario encubierto del presidente afgano.
