Clinton, Obama y Richardson suponen una renovación frente a los tradicionales 'pesos pesados' republicanos
MADRID, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
La senadora demócrata por Nueva York, Hillary Rodham Clinton, anunció hoy sábado su intención de presentarse a las primarias de cara a las elecciones a la presidencia de los Estados Unidos, que tendrán lugar en 2008, sumándose a una lista de candidatos que hasta el momento comprende, entre otros, al senador por Illinois, Barack Obama; a la espera de que el Gobernador de Nuevo México, Bill Richardson, anuncie mañana sus intenciones. Si alguno de estos tres candidatos se alzara con la victoria final, la tradición histórica del presidente "varón blanco anglosajón y protestante" caería fulminada inmediatamente.
Hillary Rodham Clinton no es la primera mujer en presentarse a la presidencia, pero de momento su nombre encabeza las listas del bloque demócrata en muchas encuestas de cara al caucus de Iowa que tendrá lugar en enero y que será la primera indicación clara de qué candidato, ya sea demócrata o republicano, cuenta con posibilidades reales para obtener la victoria en las primarias.
Y no está sola a la hora de intentar romper con la tradición. El senador Barack Obama podría convertirse en el primer presidente negro, y Richardson, si al final decide presentarse, sería la primera opción hispana al Despacho Oval. Junto a ellos, destaca el nombre de John Edwards, candidato a la vicepresidencia en 2004, que hizo oficial su participación para las primarias el pasado 28 de diciembre.
Sin embargo, los obstáculos para Rodham Clinton acaban de empezar: algunos de sus votantes siguen asociándola con el escándalo financiero de Whitewater, durante el que se vio obligada a comparecer ante una audiencia oficial en calidad de Primera Dama; los republicanos han convertido su activa intervención en el Gobierno de su marido, particularmente en cuestiones referentes a la Seguridad Social, en objeto de numerosas y ácidas caricaturas políticas, y muchos consideran su posición respecto a Irak como indefinida: ahora puede mostrarse a favor de la retirada de tropas en el país, pero pocos olvidan que votó por la intervención militar en 2002. Sin embargo, Rodham Clinton goza de una popularidad excepcional entre las mujeres y las personas de raza negra, además de ser una de las mayores fuentes de ingresos para su partido.
En el videocomunicado de presentación, colgado en su página web, la senadora hace hincapié en la necesidad de "poner a Estados Unidos en el buen camino" tras "seis años de fracaso de la Administración Bush", para a continuación plantear "varias preguntas importantes", entre las que destacan la posibilidad de "acabar correctamente con la guerra en Irak", así como "asegurar los adecuados cuidados sanitarios" al pueblo estadounidense o "garantizar que nuestros niños heredan un medio ambiente limpio, con independencia energética", sin establecer respuestas concretas ni una línea política clara definida.
Y sin embargo, la indefinición ha sido una constante a la hora de entender la visión política de la senadora Clinton, que apoya el derecho al aborto, pero que lo considera una "trágica decisión". Se muestra en contra de quemar la bandera estadounidense como expresión de protesta, pero no se decide a presentar una enmienda constitucional. Es una firme partidaria de los derechos de los homosexuales, pero aprueba o expresa su disconformidad con el matrimonio gay, dependiendo de la audiencia --liberal o conservadora-- a la que se dirija.
Clinton concluyó su discurso electrónico con una nota de esperanza, al afirmar que, en esta campaña, "haremos historia y reharemos nuestro futuro", y afirmó además que "es nuestro momento, nuestra oportunidad para ponernos a la altura de los principios y valores que aplaudimos". "Es nuestra oportunidad para decir 'podemos'", proclamó Rodham Clinton. "Y lo haremos. El futuro de América nos llama", concluyó.
OBAMA
De entre el resto de candidatos, Barack Obama es uno de los nombres que más ha calado entre el público estadounidense. Obama anunció su intención de presentarse el pasado 16 de enero a las primarias estadounidenses. En las encuestas gana fuerza, y sólo la senadora Clinton aparece por delante suya, sólo un punto por encima, según las encuestas. El senador, el único de raza negra en la cámara alta del Congreso, puede pagar cara su inexperiencia en la arena de las elecciones generales.
Precisamente hoy, Obama ha felicitado a la senadora Rodham Clinton, y dio la bienvenida "a todos los candidatos, no como competidores, sino como aliados para devolver a nuestro país al buen camino", afirmó, cogiendo prestadas las palabras de la senadora por Nueva York, con la que comparte más de un punto en común: ambos realizaron propuestas sobre Irak con escasas horas de diferencia, ambos dominaron la escena mediática tras anunciar su intención de presentarse. Y ambos hacen gala de su carácter extrovertido para recaudar fondos con la mayor rapidez posible.
Sin embargo, hay más factores que juegan en contra de Obama al margen de su experiencia. Uno de ellos es el apoyo por parte de comunidad negra, que se ha visto mermado por la opinión de algunas voces críticas, como las del columnista Stanley Crouch, que considera que el senador no pertenece a los descendientes de los esclavos y es incapaz de identificarse con los problemas de la comunidad dado que Obama, como él mismo declara, creció en el seno de una familia blanca de clase media.
Sin embargo, Obama se presenta como una fuerza unificadora entre demócratas y conservadores, un orador consumado y un férreo crítico de la guerra en Irak que podrían hacerle ganar muchos puntos en un ambiente político que, tras la victoria demócrata en las elecciones legislativas, será bastante turbulento.
TERCEROS EN DISCORDIA
Mañana domingo será el momento de Bill Richardson, gobernador de Nuevo México. Ayer viernes, varios medios del estado fronterizo informaban de que el gobernador presentará la documentación para crear un comité exploratorio presidencial para recabar fondos para sus campañas y conformar sus organizaciones políticas.
El gobernador de Nuevo México tiene programado participar mañana en el programa This Week, de la cadena nacional de televisión ABC, donde se estima que podría anunciar sus aspiraciones presidenciales. Richardson tiene amplia experiencia en el ámbito internacional, ya que varias veces medió a favor de presos o rehenes políticos y por el diálogo con países como Corea del Norte, Cuba, Sudán y Afganistán, además de servir como embajador de Estados Unidos ante la ONU.
Otro nombre a tener en cuenta es el de John Edwards, protagonista el pasado 28 de diciembre por anunciar formalmente su decisión de presentarse a las primarias en un escenario tristemente reconocible: el este de Nueva Orleans. Edwards, otro crítico con la intervención en Irak, tiene la baza de la experiencia, al haber estado nominado para la vicepresidencia en 2004. Por el momento, Edwards cuenta con un 15 por ciento en la intención de voto de cara al 'filtro' de Iowa, pero es la gran opción si el público decidiera apostar por una opción mas tradicional y menos heterogénea.
A estos nombres hay que sumar los de los senadores Christopher Dodd, Tom Vilsack y Dennis Kucinich, todos ellos candidatos demócratas oficiales a la espera de que se confirmen o no los rumores sobre una posible postulación por parte de John Kerry, Al Gore o, incluso, el general retirado Wesley Clark. De entre todos ellos, sólo uno podrá enfrentarse a los pesos pesados del republicanismo, con el ex alcalde de Nueva York y héroe del 11-S, Rudolph Giuliani, Newt Gingrich o John McCain, todos ellos pendientes de presentar su candidatura oficial.
