Dinamarca también retirará sus tropas antes de verano, mientras que Lituania estudia su salida del país y Bulgaria prorroga su misión
LONDRES, 21 Feb. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Marta Altuna) -
El primer ministro británico, Tony Blair, anunció hoy ante la Cámara de los Comunes la retirada de 1.600 soldados en los próximos meses de Irak, de los 7.100 que se encuentran actualmente en este país. A la retirada británica se sumará también para verano la de las tropas danesas, mientras que Lituania estudia la salida de sus soldados destinados en este país y Bulgaria decidió ampliar su mandato un año más.
Blair explicó que esta retirada se debe a que la situación que se vive en Basora (la zona controlada por los británicos) es bien distinta a la que se vive en Bagdad (controlada por los estadounidenses), por ser el objetivo de los grupos terroristas.
Según Blair, el número de fuerzas británicas se reducirá en Basora, pero los soldados que queden prestarán apoyo logístico "para apoyar a las fuerzas iraquíes, mantener el orden, mantener las rutas de suministro y respaldar a las fuerzas iraquíes cuando lo necesiten.
Asimismo Blair explicó que la presencia militar británica se mantendrá en 2.008, pero especificó que cada vez será más de apoyo y entrenamiento. Sobre la rapidez de la retirada de las tropas restantes, el primer ministro indicó que ésta dependerá de la situación, de lo que hagan las tropas británicas y de lo que hagan las fuerzas iraquíes.
El primer ministro recordó que Irak celebró elecciones para la nueva constitución en enero de 2005 y en diciembre de ese año elecciones parlamentarias. En mayo de 2006 se formó el primer gobierno democráticamente electo. A pesar de estos logros reconoció que "el proceso político de reconstrucción ha sido ensombrecido por la violencia y el terrorismo".
"La violencia se origina desde distintas partes, pero todos los grupos aunque tienen distintas ideologías tienen el objetivo común de evitar la democracia en Irak", declaró Blair. "La mayoría de los iraquíes votaron a pesar de la violencia y no quieren la violencia y existe deseo para que haya democracia", indicó.
"El plan es construir la capacidad de Irak para ser dueños de su propio destino", declaró el primer ministro. "Queremos que los iraquíes vean que no queremos que nuestras fuerzas permanezcan más tiempo de lo necesario", dijo ante el Parlamento.
Estos planes de retirada se hacen públicos tan sólo tres días después de que la prensa anunciara que el regimiento del Ejército en el que sirve el príncipe Enrique podría ser enviado a Irak en abril o mayo. Su padre, el príncipe Carlos fue piloto y miembro de la Marina. Su abuelo, el Duque de Edimburgo, hizo carrera en la Marina y su tío, el príncipe Andrés, sirvió en el Ejército como piloto en la guerra de las Malvinas.
Mientras, Eric Levy, representante del grupo Antiguerra afirmó que "si fuéramos nosotros los que viviéramos bajo un invasor no estaríamos diciendo que nos alegramos mucho porque se van a retirar en un futuro indeterminado". "Yo digo que es mejor retirarse pronto que nunca y pronto significa inmediatamente porque no deberíamos haber ido en un principio".
46.000 SOLDADOS
Reino Unido contribuyó con 46.000 efectivos en la invasión de Irak en marzo de 2003. Más de la mitad de ellos fueron retirados dos meses después, quedándose los restantes principalmente en torno a Basora.
El pasado mes de enero, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, anunció sus planes para incrementar en más de 20.000 el número de sus soldados en Irak, unos planes, que la ministra de Asuntos Exteriores, Margaret Beckett, apoyó, aunque dijo entonces que los británicos no iban a seguir por ese camino, ya que la situación en Basora es muy diferente a la de Bagdad, donde están la mayoría de las tropas estadounidenses.
Haber autorizado la guerra en Irak ha dañado políticamente a Tony Blair, algo que se ha visto plasmado en la pérdida de posición del Partido Laborista en las elecciones locales. Asimismo las últimas encuestas han mostrado que el Partido Laborista se encuentra en el nivel más bajo de aceptación de la última década.
DINAMARCA TAMBIEN SE RETIRA
Por otra parte, el primer ministro danés, Anders Fogh Rasmussen, confirmó hoy en rueda de prensa que su país retirará el próximo mes de agosto a sus 460 efectivos destinados en el sur de Irak y transferirá las responsabilidades en materia de seguridad a las fuerzas iraquíes.
Asimismo, Rasmussen indicó que Dinamarca va a reemplazar sus tropas por helicópteros de vigilancia y asesores civiles que ayudarán al Gobierno de Irak en sus esfuerzos de reconstrucción.
Las tropas danesas se encuentran bajo el mando militar británico en la zona próxima a Basora, en el sur de Irak. "El batallón danés volverá a casa para agosto", afirmó, explicando que había hablado ayer con el presidente estadounidense, George W. Bush, para transmitirle la decisión que éste "entendió".
El primer ministro indicó que la decisión se tomó en contacto con los Gobiernos iraquí y británico, y que se consideró "natural" retirarse después de que Londres, bajo cuyo mandato sirven las tropas danesas, también haya decidido hacerlo.
Por su parte, la portavoz del Ministerio de Defensa de Lituania, Ruta Apeitkyte, dijo hoy que el Gobierno está "considerando seriamente " retirar a los 53 soldados que mantiene desplegados en Irak y no reemplazarlos cuando concluya su misión a finales de agosto.
Entretanto, el Parlamento búlgaro aprobó hoy la ampliación de la misión de su contingente de 120 soldados desplegados en Irak por un año más. La unidad, bajo mando estadounidense, ayuda a vigilar el campamento de refugiados de Ashraf, a unos 70 kilómetros al norte de Bagdad.
REACCION DE EEUU
Desde el Gobierno estadounidense se ha ententido la decisión de Londes. La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, aseguró hoy que "la coalición permanece intacta" a pesar de la decisión de Reino Unido. "Los británicos han hecho lo que realmente se prevé para el conjunto del país, la transferencia de la responsabilidad en materia de seguridad a los iraquíes en la medida en que la situación lo permita", prosiguió. "La coalición permanece intacta y, de hecho, Reino Unido sigue contando con miles de soldados desplegados en Irak", añadió.
La Casa Blanca interpretó el anuncio de la retirada de tropas paulatina anunciada hoy por el Gobierno británico como una parte del proceso de mejora de la situación en Irak que conlleva la lógica salida del país de tropas ya no necesarias en dichas áreas, descartando cualquier idea de que Reino Unido está abandonando la coalición que mantiene con Estados Unidos.
El portavoz de la Casa Blanca, Tony Snow, explicó esta mañana que la decisión británica entra dentro de la estrategia de "progresar primero para después retirarse". Snow recordó que el presidente Bush ya dejó clara su decisión hace tiempo de que el Ejército americano debe salir del país "tan rápido como las tropas iraquíes cuenten con la capacidad suficiente para asumir de forma primero una responsabilidad principal y posteriormente la total responsabilidad" de la defensa y seguridad del país.
