Crónica Irak.- Al menos 16 muertos en ataques suicidas y 30 secuestrados en un nuevo día de violencia en Irak

Actualizado: martes, 31 octubre 2006 21:17

Al Maliki ordena desmantelar los puestos conjuntos iraquíes y estadounidenses en Ciudad Sadr, fortaleza de los partidarios de Muqtada al Sadr BAGDAD, 31 Oct. (EP/AP) -

Un nuevo día de violencia en Irak puso hoy fin al mes de octubre, uno de los peores y más sangrientos que se recuerdan desde que comenzó el conflicto en 2003, en el que se produjeron al menos 16 muertos en diversos atentados y el secuestro de unas 30 personas que viajaban en un autobús al norte de Bagdad.

El secuestro se produjo cuando al menos 30 pasajeros iraquíes, en su mayoría chiíes, fueron capturados esta tarde por un grupo de hombres armados no identificados cuando viajaban en autobús en una carretera al norte de Bagdad, según informaron fuentes policiales iraquíes.

Según dichas fuentes policiales, los pasajeros fueron secuestrados a unos 50 kilómetros al norte de la capital, en las inmediaciones de la ciudad de Tarmiyah.

La Policía está investigando el incidente y con la colaboración de testigos presenciales, según informó un miembro del Centro de Cooperación Conjunto de la ciudad de Tikrit, cuya carretera hacia Bagdad es considerada como una de las más peligrosas de Irak, escenario de frecuentes robos violentos, secuestros y atentados a vehículos, al atravesar el triángulo suní de la insurgencia.

Por su parte, testigos presenciales señalaron a la Policía que un número indeterminado de hombres armados dieron el alto a varios vehículos, entre ellos, dos coches y tres minibuses, y obligaron a varios pasajeros a bajarse, según fuentes policiales, que no pudieron precisar el número exacto de personas secuestradas.

En otro episodio de violencia sectaria, al menos once personas murieron, entre ellas cuatro niños, y otras 12 sufrieron heridas en Bagdad al estallar un coche bomba durante la celebración de una boda chií, según informaron fuentes policiales.

El vehículo cargado de explosivos era conducido por un presunto suicida, que lo condujo hacia la multitud de personas que festejaban la boda en casa de la novia y que se encontraban en ese momento en la puerta, en el barrio bagdadí de Shaab, en torno a las 16:50 horas (hora local, 14:50 en la España peninsular), explicó el teniente de la Policía, Ahmed Mohamed.

Entre los heridos hospitalizados se encuentran además cinco niños, la mayoría por quemaduras en gran parte del cuerpo, según indicó el doctor Qasim al Suweadi, del hospital Al Sadr.

Durante esta mañana además otras tres personas murieron como consecuencia de la explosión de un coche bomba en el barrio bagdadí de Ciudad Sadr, un día después de que otra bomba causara la muerte de 33 personas en este barrio de mayoría chií. Asimismo, dos agentes de Policía fueron asesinados en la capital y las autoridades localizaron esta mañana en el este de Bagdad los cadáveres de otras cinco personas, incluido el de una mujer, con señales de tortura.

Aparte, el Ejército estadounidense anunció hoy la muerte de dos soldados, que elevan a 103 los militares norteamericanos caídos en combate en Irak a lo largo de este mes de octubre y demuestra que las cosas no marchan demasiado bien tampoco para los norteamericanos en Irak. Uno de los soldados, destinado en Bagdad, murió hacia las 17.00 horas de la tarde de ayer (13.00 horas de la tarde en España) por disparos de arma ligera en el oeste de la capital. El segundo falleció media hora más tarde en el sur de Bagdad por la explosión de una bomba al paso de su vehículo.

El atentado de Ciudad Sadr ocurrió hacia las 8:30 hora local (6:30 en España), y causó la muerte de dos hombres y una mujer que estaban montando en un automóvil cerca de un restaurante de la zona, según el teniente de la Policía, Ahmed Mohamed Alí.

El atentado fue posible a pesar de los controles militares instalados en los alrededores de este distrito, feudo del Ejército del Mahdi, las milicias del clérigo chií antiestadounidense Muqtada al Sadr. En un comunicado transmitido ayer a sus partidarios locales, Al Sadr advirtió de posibles acciones armadas no especificadas si continuaba el "asedio" militar.

A raíz de esto, el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, ordenó hoy el levantamiento de los puestos de control conjuntos iraquíes y estadounidenses instalados en los alrededores del barrio de Ciudad Sadr.

Todas las barricadas y puestos de control de Ciudad Sadr y de otros puntos de Bagdad deberán quedar levantadas a las 17:00 hora local (15:00 hora en España), ordenó Al Maliki en su doble condición de primer ministro y jefe de las fuerzas armadas. "No se deberá tomar este tipo de medidas salvo en las horas de toque de queda nocturno o en caso de emergencia", se lee en la orden.

En todo caso, "prosiguen los esfuerzos conjuntos para perseguir a los terroristas y a los elementos fuera de la ley que exponen las vidas de ciudadanos a homicidios, secuestros y explosiones".

Por otra parte, un policía murió y tres resultaron heridos esta mañana como consecuencia de la explosión de una bomba al paso de una patrulla en el barrio de Nuevo Bagdad, en el sureste de la capital, según el teniente Mohamed Jeyun, de la Policía.

Asimismo, otro agente de Policía, el jefe de comando Ali Abdul Kadhim, murió por los disparos de varios hombres armados desconocidos desde un automóvil cerca de su vivienda en el este de Bagdad, según otro oficial de la Policía, el capitán Mohamed Abdul-Ghani.