Crónica Israel-Katsav se niega a dimitir por ahora y achaca a "horribles mentiras envenenadas" las acusaciones contra él

Actualizado: miércoles, 24 enero 2007 21:34

Olmert, Livni y las principales figuras políticas israelíes coinciden en pedir la dimisión inmediata del presidente JERUSALÉN, 24 Ene. (EP/AP) -

El presidente israelí, Moshe Katsav, prometió hoy que dimitirá "inmediatamente" de su cargo si finalmente el fiscal general decide imputarle, tras asegurar que todos los cargos de los que se le pretende acusar son "horribles mentiras" y que está siendo objeto de "uno de los peores ataques de la historia de Israel".

Katsav compareció hoy ante la prensa, visiblemente molesto e irritado, después de que el fiscal general, Menachem Mazuz, recomendara ayer presentar cargos contra el jefe de Estado por violación, abuso sexual y obstrucción a la justicia entre otros, después de afirmar que existen pruebas suficientes para seguir adelante con el proceso.

En una actitud desafiante, pese a los llamamientos que han llegado desde todos los sectores políticos israelíes a que dimita de forma inmediata, Katsav dijo que se trata todo de "mentiras horribles y envenenadas".

"No creáis la difamación, las mentiras. Hay sólo una verdad: soy el objeto de uno de los peores ataques de la historia del Estado de Israel", aseguró, en una rueda de prensa televisada por todas las cadenas.

El presidente, visiblemente enfadado acusó duramente a los medios de sus problemas con la justicia, arremetiendo en particular contra uno de los periodistas presentes, del canal 2 de televisión israelí, al que dijo que debía avergonzarse de la cobertura que ha hecho de su caso, y aseguró que "luchará hasta su último aliento, incluso si eso significa una guerra, para limpiar mi nombre".

"No cometí ninguno de los actos que se me atribuyen", aseguró. "Si el fiscal general decide optar por la acusación, prometo dimitir inmediatamente", agregó. El presidente tiene aún la oportunidad de presentar nuevas pruebas en su defensa antes de que se produzca una acusación formal en su contra y sus abogados dijeron ayer que esperan que Mazuz "cambie de opinión".

Katsav, nacido en Irán, consideró que los cargos de los que se le acusa están motivados por el racismo existente contra los israelíes nacidos en Oriente Próximo, que tradicionalmente son marginados por los judíos de herencia europea. "Me veo como un símbolo de todos aquellos que no forman parte de la elite nacida con cucharas de plata en sus bocas (...) que creen que sólo ellos pueden representar al pueblo de Israel", afirmó.

Katsav ha informado hoy a la presidenta de la Knesset (Parlamento), Dalia Itzik, de que se declarará temporalmente incapacitado pero no dimitirá .

Para que la petición de Katsav, que transmitió en una carta a Itzik, sea efectiva, tiene que ser aprobada por el Comité de la Cámara de la Knesset. Mientras, la facción parlamentaria del Meretz (izquierda) ha comenzado a recoger firmas para iniciar un proceso de destitución en la Knesset ante la perspectiva de que Katsav no presentaría su dimisión por iniciativa propia.

LOS POLÍTICOS PIDEN LA DIMISIÓN AL UNÍSONO

Por su parte, el espectro político israelí se ha echado encima del presidente para pedir su dimisión al unísono. El primer ministro israelí, Ehud Olmert, pidió a Katsav, minutos después de su comparecencia pública, que dimita.

"Bajo estas circunstancias, no hay dudas en mi mente de que el presidente no puede continuar ocupando su posición y debe salir de la residencia presidencial", manifestó Olmert al comienzo de un discurso político en una conferencia de seguridad.

Tras conocerse ayer la decisión de Mazuz, numerosos parlamentarios de todo el espectro electoral han reclamado a Katsav que presente su dimisión de forma inmediata antes de ser acusado formalmente. A ellos se sumaron hoy la ministra de Justicia y Exteriores, Tzipi Livni, y el de Seguridad Pública, Avi Dichter.

Así, la ministra de Justicia, Tzipi Livni, ha pedido al presidente esta mañana que dimita de su cargo. Aunque Katsav seguirá siendo inocente hasta que se demuestre lo contrario, "no debería batallar para demostrar su inocencia desde la Presidencia", declaró en un comunicado Tzipi Livni, que ejerce las carteras de Justicia y Asuntos Exteriores. "La ministra Livni está convencida de que la dimisión es la acción más apropiada en estos momentos", añadió el texto.

Por su parte, la ministra de Educación, Yuli Tamir, planteó la posibilidad de retirar todas las fotografías del presidente israelí, Moshe Katsav, de las instituciones de enseñanza del país. "Mientras el presidente esté suspendido, tener sus fotografías en cada escuela es irreal. El Ministerio está actualmente discutiendo el asunto".

Tamir además se unió a las peticiones de casi toda la esfera política israelí para que Katsav dimita inmediatamente, con objeto de ahorrar la vergüenza a los estudiantes. "La situación actual hace imposible educar a los estudiantes en el respeto a la oficina del presidente", constató.

Hasta hoy, ningún presidente había sido acusado formalmente de crímenes. El antecesor de Katsav, Ezer Weizman, dimitió en 2000 después de que se descubriera que aceptó más de 230.000 euros en regalos de un millonario francés, pero nunca fue imputado.

Katsav, siendo ministro sin cartera del Gabinete y miembro del partido Likud, fue elegido presidente por la Knesset en 2000 después de que un rabino cambiara su voto alegando que "una visión" le mostró que el cielo favorecía al actual mandatario.