Crónica Líbano/Israel.- La ofensiva del Ejército israelí en Líbano se cobra en su primera semana más de 250 vidas

Actualizado: martes, 18 julio 2006 23:43

Gobiernos de todo el mundo se movilizan para evacuar a sus ciudadanos de Líbano

BEIRUT, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

La ofensiva 'total' del Ejército israelí en Líbano a raíz del secuestro de dos de sus soldados a manos de la milicia chií Hezbolá entrará en su segunda semana con un saldo de 255 muertos, 230 del lado libanés, la mayoría civiles y 25 israelíes, 12 de ellos soldados. Mientras, centenares de ciudadanos extranjeros están siendo evacuados de la zona en amplios operativos desplegados por sus respectivos Gobiernos.

Los aviones de combate de las Fuerzas Aéreas de Israel siguieron bombardeando Líbano durante el día de hoy, matando a 13 civiles --todos ellos miembros de dos familias--- y 14 soldados libaneses. Mientras, los cohetes lanzados por Hezbolá contra ciudades del norte de Israel terminaron con la vida de una persona en Nahariya.

Según el Ejército israelí, entre el 40 y el 50 por ciento de la capacidad militar de la milicia ha sido destruida en los seis días de bombardeos. Al ritmo actual, necesitará al menos otra semana para conseguir que Hezbolá deje de ser una amenaza para Israel. Sin embargo, el subjefe del Estado Mayor israelí, teniente general Moshe Kaplinsky, declaró a la Radio del Ejército que la ofensiva contra Hezbolá podría concluir "en cuestión de semanas".

Las fuerzas israelíes están intentando minar la capacidad de Hezbolá de disparar cohetes contra Israel y no se descarta la posibilidad de una invasión terrestre de Líbano, según indicó el 'número dos' del Ejército israelí, mayor general Moshe Kaplinski.

Así las cosas, Israel sólo considerará un intercambio de presos con Líbano para conseguir la liberación de sus dos soldados cuando haya completado su operación militar, según señaló el ministro de Seguridad Pública, Avi Dichter.

En términos similares se expresó el primer ministro israelí, Ehud Olmert, quien dejó claro que Israel seguirá combatiendo a Hezbolá hasta que ésta ponga en libertad a los dos soldados secuestrados y se garantice la seguridad de Israel.

Del lado contrario, el primer ministro libanés, Fuad Siniora, acusó a Israel de abrir "las puertas del infierno y la locura" a su país, en una entrevista a la BBC. Asimismo, urgió a Hezbolá a liberar a los dos soldados hebreos que mantiene secuestrados, pero valoró que la respuesta de Israel a la crisis ha sido "desproporcionada". Además, el presidente libanés, Emile Lahud, dejó claro que su Gobierno nunca entregará al líder de Hezbolá, Hasan Nasralá, ya que --en su opinión-- éste consiguió la liberación de su país junto al Ejército libanés.

MEDIACION INTERNACIONAL

Mientras, la mediación diplomática internacional prosiguió hoy, aunque con escasos frutos aún. La ministra de Asuntos Exteriores israelí, Tzipi Livni, hizo un llamamiento al desarme de Hezbolá y al despliegue de tropas libanesas en la frontera entre los dos países, durante la visita de negociadores de la ONU para presionar en pro de una solución política a la crisis.

Asimismo, según recoge el diario 'Haaretz' en su edición electrónica, la ministra dijo que Israel no pondría objeciones a un despliegue temporal de una fuerza internacional en el sur de Líbano si bien preferiría que fueran las tropas libanesas las que se desplegaran en esta zona de su territorio.

Por otra parte, Livni reclamó la liberación sin condiciones de los soldados. "Un alto el fuego no es suficiente, los soldados deben ser devueltos sin condiciones", afirmó. Precisamente, la idea de un alto el fuego fue firmemente defendida por la secretaria de Estado norteamericano, Condoleezza Rice, aunque valoró que debería producirse cuando las condiciones sean "propicias" para ello.

Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, manifestó su esperanza en que los países de la Unión Europea contribuyan a la eventual fuerza de estabilización que podría desplegarse en la frontera entre Líbano e Israel y cuyo mandato y tamaño deberá ser objeto de discusión en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

Igualmente, el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior y de Seguridad Común, Javier Solana, anunció hoy un nuevo viaje a Oriente Próximo para tratar de impulsar con los principales actores de la región el establecimiento de una fuerza de pacificación en la frontera entre Líbano e Israel.

Según el primer ministro británico, Irán y Siria son los responsables de la escalada de violencia que se vive en Oriente Próximo por apoyar a Hezbolá en su lucha contra Israel. Blair declaró que está claro que Hezbolá, y no Israel, es el culpable de los enfrentamientos en la región que se han cobrado en una semana más de 250 vidas. "Hezbolá es apoyado por Siria e Irán. Por unos con armas, por otros en varias formas, y por los dos financieramente", dijo.

Mientras, el presidente francés, Jacques Chirac, pidió "ayuda humanitaria urgente" para Líbano. En un comunicado del Elíseo, el jefe de Estado pidió una movilización de la comunidad internacional para poner fin a esta situación. Más duro se mostró el ministro de Exteriores, Philippe Douste-Blazy, quien volvió a reclamar al Ejército de Israel y a Hezbolá el fin de la "espiral loca" de violencia que se ha desatado en Oriente Próximo.

Finalmente, el ministro italiano de Asuntos Exteriores, Massimo D'Alema, afirmó que Italia ha pedido a Siria e Irán que contribuyan para comenzar a dialogar y detener la escalada bélica en Líbano.

REFUGIADOS Y EVACUADOS

En cualquier conflicto, la población civil suele ser siempre la más afectada. El Gobierno libanés ha estimado en al menos 65.000 el número de personas desplazadas de sus hogares debido a los bombardeos israelíes en Líbano, la mayoría de las cuales buscan refugio en Beirut y en el norte del país, según informó un portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).

La ONU está evacuando a su personal no esencial de Beirut y la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) está supervisando de cerca la situación en todo el país, en especial la de los miles de refugiados iraquíes y sudaneses que se encuentran en él y la de los que intentan llegar a Siria, según indicó un portavoz de la citada agencia de la ONU, Jennifer Pagonis.

Mejor suerte correrán cientos de miles de ciudadanos extranjeros que serán evacuados de Líbano, bien a través de otros aeropuertos como los de Damasco o Ammán, o bien por mar, hasta Chipre, donde en los próximos días podrían llegar más de 80.000 personas.

El embajador estadounidense en Líbano, Jeffrey D. Feltman, informó de que 320 estadounidenses serán evacuados a lo largo del día de hoy de Líbano a Chipre y que más de un millar dejarán el país mañana.

Además, Estados Unidos ha enviado un crucero, "The Orient Queen", capaz de transportar a 750 pasajeros para ayudar en las labores de evacuación. La embarcación dejó Chipre esta mañana y la Embajada adelantó que hoy mismo procedería a evacuar a ciudadanos norteamericanos.

Por su parte, Reino Unido ha hecho más de lo mismo y ha enviado a la costa libanesa varios barcos, uno de los cuáles llegó hoy. Londres está preparado para evacuar a hasta 22.000 ciudadanos británicos que residen en Líbano. Ayer y hoy dos helicópteros militares británicos aterrizaron en una franja de la costa cercana a Beirut para recoger a decenas de ciudadanos de Reino unido y dejarlos en Chipre, donde el Ejército británico tiene una base.

Por otro lado, alrededor de 175 personas llegaron esta noche a Madrid en otro vuelo procedente de Damasco. Este grupo forma parte de la tercera fase de repatriación de españoles y extranjeros que ha gestionado el Gobierno español desde el inicio de la crisis. Del mismo modo, un grupo de 35 españoles llegaron a Chipre a bordo de un barco francés y en las próximas horas tomarán un vuelo desde Nicosia a París.