Crónica Pakistán/UE.- Musharraf asegura a la UE que Pakistán no es cuna de terroristas y pide un cambio de percepción

Actualizado: martes, 12 septiembre 2006 21:24

Alerta de un proceso de "talibanización" e indica que sus responsables están en el sur de Afganistán

BRUSELAS, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, aseguró hoy ante el Parlamento Europeo que su país no es un nido de terroristas y señaló que los vínculos que puedan establecerse entre algunos sectores sociales de su país con los talibán y otros responsables del terrorismo se debe a los miles de muyahidines que se encuentran en su territorio como consecuencia de distintas guerras, principalmente contra la invasión soviética en Afganistán en los años 80.

"Pakistán no es, repito, no es una sociedad extremista e intolerante como la percibe Occidente", indicó Musharraf ante el Parlamento Europeo, donde añadió que "independientemente del terrorismo que pueda o no haber, es consecuencia de seis años de guerra y fanatismo a nuestro alrededor".

El presidente de Pakistán pidió un "cambio de percepción" sobre su país durante su comparecencia hoy ante la comisión de Relaciones Exteriores del Parlamento Europeo, después de lo cual se reunió con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. Mañana se encontrará con el Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Javier Solana.

Barroso "reconoció" en rueda de prensa junto a Musharraf "el papel de Pakistán contra redes terroristas", como "se demostró" en el complot para hacer estallar aviones comerciales en pleno vuelo entre Reino Unido y Estados Unidos a mediados de agosto, en alusión a la detención de un presunto implicado practicada en el país asiático.

En la Eurocámara Musharraf enumeró distintos hechos que le llevaron a señalar que "Pakistán se está transformando" y proclamó que "el mundo tiene que cambiar su percepción", aunque, dijo, "aún hay retos por delante para ganar contra las fuerzas del terrorismo y el extremismo". "Pakistán es un aliado y hay que tratarlo como tal", insistió.

DEFENSA DE PAKISTÁN

En su comparecencia ante la comisión parlamentaria, Musharraf se empleó a fondo en defender a la sociedad paquistaní, que es mayoritariamente "moderada, religiosa pero no extremista", frente a dos extremos sociales de su país: "el ultraconservador, los extremistas y oscurantistas" y "los ultraliberales, occidentalizados que no están sintonizados con nuestra cultura".

"Pasamos por unos extremistas a ojos de Occidente", dijo, "pero la mayoría de los paquistaníes son tolerantes, hay fanatismo, pero el terrorismo y el fanatismo religioso no nos son inherentes", sino que llegaron desde el exterior, particularmente por la guerra que capitaneó Estados Unidos contra la invasión soviética en Afganistán y al término de la cual "nos dejaron en la estacada con cuatro millones de refugiados y 30.000 muyahidines".

Musharraf se mostró consciente de que "dicen que no hacemos lo suficiente o que el Gobierno o los servicios de Inteligencia intervienen" en apoyo de actos terroristas, una idea que rechazó y contrapuso con la "estrategia" que, según explicó, ha puesto en marcha su Gobierno para acordar con los jefes tribales del país el rechazo tanto a miembros de la red Al Qaeda como de los talibán.

"TALIBANIZACIÓN"

A este respecto, el presidente paquistaní advirtió de que hay un nuevo escenario y que "la gravedad es que el terrorismo ha cambiado desde Al Qaeda a los talibán, un nuevo elemento más peligroso", puesto que tiene raíces con el pueblo de las que carece la red liderada por Usama bin Laden.

Empleó el término "talibanización" para referirse a "un concepto social del oscurantismo" y que, en su opinión, es el que se está imponiendo en la actualidad. De este modo, aconsejó "tener en cuenta quién manda en los talibán" que no es Bin Laden, sino "el mulá Omar y su cadena de mando". Acto seguido recordó que Omar fue expulsado de Pakistán y aventuró que los dirigentes están "seguramente en el sur de Afganistán".

Negó que la lucha contra los talibán haya sido un fracaso, aunque admitió que "puede que no estemos progresando lo suficiente" y reiteró que "el entorno ha cambiado, de Al Qaeda a los talibán, hay que reflexionar sobre la adaptación del ambiente y readaptar la lucha".

En su país, prosiguió, "el apoyo a los talibán se confina a alguna parte muy pequeña en la frontera (con Afganistán), la lucha continúa, pero sugerimos una nueva estrategia militar, administrativa, política y actividad de reconstrucción". Hizo esta reclamación particularmente a la UE, a la que pidió más "inversiones y comercio" con su país.

"Pakistán está realizando una contribución significativa a la paz y la estabilidad, es un socio sincero y necesitamos colaboración", dijo su presidente, que reclamó a la UE que amplíe su acceso al mercado de productos paquistaníes como método de reducir la pobreza y "tratar las raíces del extremismo".

INDIA

Por otra parte, Musharraf aseguró que las relaciones con India "nunca han sido tan buenas", aunque aseguró que "la clave" de las tensiones que enfrenta a ambos países desde 1948 es la región fronteriza de Cachemira, un conflicto que ha vivido momentos de distensión, pero también de gran tensión ya que las dos naciones son potencias nucleares.

Musharraf y el primer ministro indio, Manmohan Singh, se encontrarán durante la Cumbre de los Países No Alienados que se celebra esta semana en Cuba para tratar de "fijar medidas de confianza" para dar salida a un conflicto, pero para lo que el presidente paquistaní rechazó el statu quo.

En este sentido, esperó un "acuerdo político pacífico para el problema", pero subrayó que "el status quo no es la respuesta". Manifestó su confianza en Singh y señaló que "queremos una solución de acuerdo con la voluntad de la gente de Cachemira y de India y Pakistán".