Crónica RCA.- Los secuestros de voluntarios dificultan "enormemente" las actividades humanitarias en Vakaga, según ONU

Actualizado: domingo, 6 diciembre 2009 12:53

Los cooperantes exigen la inmediata liberación de dos de sus compañeros secuestrados el pasado domingo

MADRID, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -

Naciones Unidas ha advertido esta semana de que la amenaza de secuestro que pesa sobre sus cooperantes "daña enormemente" las actividades humanitarias en la remota y empobrecidísima región de Vakaga, en el noreste del país, sobre todo después de que dos de sus voluntarios fueran hechos cautivos a última hora del domingo por "una partida de secuestradores".

El director de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), Jean Sébastien Munié, las ONG han contribuido de manera "crucial" a la hora de asegurar el bienestar de la población de la región, particularmente en lo que se refiere al desarrollo de programas de rehabilitación que atienen las necesidades de centenares de desplazados.

"Nuestra presencia es mucho más que simbólica", declaró Munié. "Es la misma población la que exige nuestra presencia enérgicamente". Munié, no obstante, advirtió de que los problemas de seguridad deben ser tomados muy en serio, porque el secuestro de los voluntarios "provoca un trauma en la comunidad humanitaria, afectada cuando ve cómo sus compañeros desaparecen así".

Los dos secuestrados, ambos miembros de la ONG francesa Triángulo, fueron apresados el pasado domingo por la noche en la región de Birao por una "partida de secuestradores" que se apropió de dos coches de la ONG y de una motocicleta. Un tercer rehén que trabajaba para la asociación humanitaria Comité de Ayuda Médica (CAM) fue liberado minutos por los secuestradores tras una tensa "deliberación interna".

Fuentes diplomáticas en la capital de RCA, Bangui, han advertido de que es necesario evitar cualquier tipo de rumor o especulación referida a los secuestros, y subrayan que hasta el momento son muy pocos los detalles confirmados sobre el paradero o las identidades de los secuestradores. Se especula con la posibilidad de que las llamadas Águilas de la Liberación de África, un oscuro grupo contra la influencia del Gobierno francés en el país, esté detrás de los secuestros.

Esta organización se dio a conocer en abril de 2009 cuando secuestraron a dos cooperantes de Francia y Canadá que trabajaban para la ONG francesa Ayuda Médica Internacional en el este de Chad. Ambas cooperantes fueron liberadas 25 días después.

El grupo argumentó que tenía intención de presionar a Francia para que condenara a la organización gala de El Arca de Zoé, a la que acusaron de organizar el secuestro de decenas de niños chadianos en octubre de 2007. Este grupo asegura mantener secuestrado al agrónomo Laurent Maurice, miembro de Cruz Roja Internacional, motivo por el cual esta organización ha suspendido sus actividades en el este chadiano.

Fuerzas rebeldes de RCA desmienten la existencia de las Águilas, y afirman que los secuestradores son, en realidad, "oportunistas y bandidos sin principios ni movimiento al que pertenecer". Fuentes diplomáticas comparten cierto escepticismo. "Podrían ser ellos o no, no sabemos hasta qué punto son fiables los secuestradores. Es demasiado pronto para sacar conclusiones", aseguraron a la agencia de información de Naciones Unidas, IRIN.

REGIÓN EMPOBRECIDA

Vakaga se encuentra a unos 1.000 kilómetros al noroeste de Bangui y se encuentra escasamente poblada. Birao es la capital provincial y alberga un contingente de tropas, de mayoría togolesa, pertenecientes a la Misión de Naciones Unidas en el Centro de África y Chad (MINURCAT).

En este sentido, responsables humanitarios han declarado sentirse "completamente sorprendidos" ante la "ineptitud" de las fuerzas de Naciones Unidas a la hora de responder al secuestro de Birao. Los soldados llegaron mucho después de que se diera la alerta tras el asalto.

El secuestro del 22 de noviembre llega después de un período de relativa calma en la región, donde las tensiones étnicas entre los Gula y los Kara provocaron importantes brotes de violencia en el país africano, así como cientos de desplazados el pasado mes de junio.

Los rebeldes de la Unión de Fuerzas Democráticas para la Unidad (UFDR) han colaborado con el Gobierno central y con el Ejército centroafricano para estabilizar la región y ambas comunidades han realizado esfuerzos para obtener una solución dialogada al conflicto. En ningún caso, se resalta, se ha tenido constancia de secuestros durante el enfrentamiento étnico.

A lo largo de los últimos meses, las organizaciones humanitarias sde han centrado en convencer a la población --eminentemente rural-- para que vuelva a sus hogares y a trabajar el campo porque de lo contrario se arriesgan a interrumpir el ciclo de producción agrícola.

A consecuencia de los secuestros, todas las organizaciones antes mencionadas han suspendido su labor humanitaria en Birao, y la comunidad local sufre las consecuencias. "Cuando ves algo así en un sitio donde la gente cree que está protegida, comienzan a lanzar muchas preguntas al aire", declaró Munié.

De igual modo se han suspendido las labores humanitarias en Ndélé, la capital de la provincia de Bamingui-Bangoran, anexa a Vakaga, donde las luchas rebeldes han provocado la huida de los cooperantes.