Crónica RDC.- Congo sufre el conflicto más mortífero del mundo desde 1945, con 38.000 muertos al mes

Actualizado: domingo, 8 enero 2006 15:04

La mayor parte de los fallecidos se producen por la hambruna y las enfermedades tras el colapso del servicio sanitario

MADRID, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -

La República Democrática de Congo (RDC) sufre el conflicto armado más grave desde 1945, con 38.000 muertos al mes a causa de la desnutrición y las enfermedades evitables tras producirse un colapso en el sistema sanitario debido a la violencia que azota el país africano desde 1998, según un estudio elaborado por el diario médico británico 'Lancet'.

Desde el comienzo de la guerra civil al menos 4 millones de personas han perdido la vida, convirtiendo el conflicto en el más sangriento desde la Segunda Guerra Mundial. A pesar de que actualmente los grandes enfrentamientos se han reducido drásticamente, gracias a los acuerdos de paz firmados entre el Gobierno y las fuerzas rebeldes y a la presencia de 17.000 soldados de la fuerza militar de Naciones Unidas, continúan las emboscadas, asesinatos y saqueos, convirtiendo especialmente la zona este, bajo influencia rebelde, en el imperio sin ley.

"Congo sufre la crisis más mortífera en el mundo de los últimos 60 años" aseguró el director del estudio, Richard Brennan. "La ignorancia sobre el alcance y el impacto de este conflicto es casi universal y el compromiso internacional no es proporcional a la ayuda que se necesita", afirmó.

Este compromiso internacional está constituido por la fuerza de paz de la ONU, la mayor del mundo, encargada de restaurar el orden y organizar elecciones para finales de junio, proceso que los congoleños esperan que sirva para acabar con la violencia.

Tras visitar cerca de 20.000 hogares por todo el país en un período de tres meses en 2004, los autores del estudio llegaron a la conclusión de que son los niños los más afectados por el aumento de la tasa de mortalidad debido a enfermedades prevenibles y tratables como malaria, enfermedades respiratorias, malnutrición y diarrea.

Se compararon las tasas de mortalidad previas a la guerra con las posteriores, llegando a la conclusión de que las actuales doblan el nivel anterior. En comparación con países o regiones vecinas, la mortalidad congolesa en un 40 por ciento mayor que Africa subsahariana. La tasa en Congo es de 2.1 muertos por cada 1.000 habitantes, frente al 1.5 por cada mil de la tasa global del continente.

La situación se complica en las provincias del este del país, las más duramente golpeadas por las luchas y la falta de leyes durante una década. Allí la tasa de muertes es un 93 por ciento mayor que la de Africa subsahariana.

"La alta mortalidad es profundamente inquietante e indica que los esfuerzos nacionales e internacionales para acabar con la crisis siguen siendo inadecuados", dice el informe. "La naciones donantes ricas están fallado al pueblo de Congo, incluso sabiendo que cada pocos meses la mortalidad alcanza la de dos tsunamis como el del sureste asiático", continúa.

"UNA GRAN MENTIRA"

El Gobierno de Congo por su parte ha rechazado el informe, alegando que los datos son "exagerados". Así lo expresó el ministro de Información, Henri Mova Sakanyi: "Considero esto una gran mentira", afirmó. "Los datos son exagerados, en todo el mundo la gente muere de enfermedades, no sólo en Congo", argumentó.

"Es por todos sabido que las agencias (de ayuda) juegan frecuentemente con las cifras para obtener apoyo financiero", añadió el ministro.

El Gobierno mientras tanto trata de reestablecer la seguridad y la autoridad en el país de cara a las próximas elecciones, las primeras que se celebrarán en décadas. Sin embargo las milicias rebeldes aún controlan partes del territorio en el este, mientras antiguos líderes insurgentes han sido recolocados en puestos gubernamentales.

Un conflicto armado en Congo ha sido sucedido por otro, y en ellos han participado siete países extranjeros. El primero tuvo lugar en 1996-1997 cuando rebeldes apoyados por Ruanda tomaron control del país para expulsar al dictador Mobutu Sese Seko. El segundo, de 1998a 2002 fue alentado y contó con la participación de seis naciones africanas.

Todos los participantes, tanto extranjeros como nacionales, han sido acusados en numerosas ocasiones de luchar sólo para saquear y controlar los amplios recursos minerales de un país del tamaño de la europa occidental. Las guerras han acabado con la seguridad social, han producido desplazamientos masivos, ha fomentado los abusos a los derechos y el incremento de las violaciones, e incluso algunas áreas remotas aún están incomunicadas con el exterior.