Crónica Sáhara.- Marruecos recuerda la 'Marcha Verde' en plena crisis por la visita de los Reyes a Ceuta y Melilla

Actualizado: domingo, 4 noviembre 2007 19:13

Se cumplen 32 años de la invasión del Sáhara Occidental organizada por Hasán II

MADRID, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -

El próximo 6 de noviembre, se cumplirán 32 años del comienzo de la llamada 'Marcha Verde', uno de los hitos históricos más importantes para la mística nacionalista marroquí, desencadenante de la descolonización irregular del Sáhara Occidental por parte de la agonizante dictadura franquista. Además, este aniversario coincide con el revuelo provocado en la clase política marroquí por la visita institucional de los Reyes de España a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, anunciada precisamente cuando las posturas con respecto a la cuestión del Sáhara de los Gobiernos español y marroquí parecían confluir.

La 'Marcha Verde' está en el origen de la crisis más grave y enquistada que vive el Magreb y desencadenó la ocupación militar de este territorio de 266.000 kilómetros cuadrados, la oposición armada del Frente Polisario y la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática.

Con una España en pleno marasmo político por la agonía del entonces jefe del Estado, Francisco Franco, más de 350.000 marroquíes, convocados por su rey, Hasán II, se concentraron aquel día en la región de Tarfaya, en el extremo sur de Marruecos, y penetraron pacíficamente hasta 12 kilómetros en territorio saharaui sin oposición alguna por parte del Ejército español. Los componentes de la marcha estaban encabezados por el entonces primer ministro y cuñado del rey, Ahmed Osman, y blandían banderas rojas y verdes.

El proceso histórico que culminó en la 'Marcha Verde' comenzó con el ingreso de España en la ONU en 1955, circunstancia que obligó al régimen español a someterse a los principios del organismo en materia de descolonización.

La presión de la ONU a lo largo de la década de 1960 obligó a España a aceptar una breve fase de autonomía para su provincia y a fijar para 1975 la celebración del referéndum de autodeterminación. Mientras, una parte de los saharauis decidió tomar las armas y constituir, en mayo de 1973, el Frente para la Liberación de Saguia el Hamra y Río de Oro (Frente Polisario), liderado por Mustafá Sayed.

El 12 de mayo de 1975, una Comisión de Investigación de la ONU llegaba al territorio saharaui y comprobaba que "el Polisario es la única fuerza política dominante en el territorio y que la inmensa mayoría del pueblo desea la independencia". Pero las circunstancias creadas en España por la enfermedad de Franco y la confusión del "interregno", facilitaron, el 6 de noviembre de 1975, la 'Marcha Verde' por parte de Marruecos, al tiempo que Mauritania lanzaba desde el sur a su Ejército en un plan organizado para repartirse con Marruecos el territorio saharaui.

Tras la tenaza política y militar marroquí y mauritana, se produjo la huida masiva de población civil saharaui, que fue atacada con 'napalm' y fósforo blanco por la aviación marroquí, según denunciaron fuentes próximas al Polisario. El 14 de noviembre de 1975, España firmó los Acuerdos Tripartitos de Madrid, por los que entregaba el control territorial (que no la soberanía) a Marruecos y Mauritania. En agosto de 1979, Marruecos se hizo con la totalidad del territorio tras la renuncia de Mauritania a su parte.

En la noche de 26 de febrero de 1976, España finalizaba su presencia colonial en el Sahara. El 27 de febrero de 1976, el Frente Polisario proclamaba la República Arabe Saharaui Democrática (RASD), reconocida en noviembre de 1984 por la mayoría de países de la Organización para la Unidad Africana. Durante este período, comenzó el éxodo de grandes cantidades de refugiados saharauis que se establecieron en campamentos en la desértica región argelina de Tinduf, mientras se multiplicaban las violaciones de Derechos Humanos cometidas por Marruecos contra activistas saharauis.

PLAN DE PAZ Y REFERENDUM

Tras varios años de esporádicos enfrentamientos militares, Rabat y el Polisario aceptaron, en agosto de 1988, un Plan de Paz propuesto por la ONU para un alto el fuego y la organización de un referéndum. Hasta tres años más tarde no se empezó a aplicar el Plan, con la creación en abril de 1991 de la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum en el Sahara Occidental (MINURSO) y la llegada de los 'cascos azules', en septiembre.

En estos casi quince años, el referéndum ha sido constantemente aplazado por diferencias entre los criterios que se deberían aplicar para la identificación de los votantes. Mientras el Polisario siempre ha considerado que sólo los 74.000 saharauis (y sus familiares) censados en 1974 por España deberían poder votar, Marruecos pretendió inscribir a otras 170.000 personas no incluidas en aquel censo y persiste en rechazar cualquier cuestionamiento sobre la "marroquinidad" del territorio.

El mandato de la MINURSO se ha ido renovando periódicamente desde su establecimiento. La última de las prórrogas fue el pasado 30 de abril y aprueba la extensión de la misión de la ONU otros seis meses más hasta octubre de 2007. El británico Julian Harston es el último enviado especial del secretario general de la ONU para la región.

"POSICIONES CASI IRRECONCILIABLES"

La primera gran iniciativa de paz desde el alto el fuego de 1991 corrió a cargo de Baker con dos propuestas de paz que presentó a las partes en 2002 y 2003. El llamado 'Plan Baker II' preveía instaurar en el Sáhara Occidental una autonomía y, al cabo de cinco años, celebrar un referéndum sobre la posible independencia.

Mientras el Frente Polisario y Argelia dieron su visto bueno a la propuesta, Marruecos lo rechazó en su conjunto al ponerse en cuestión al término de ese período de cinco años su soberanía sobre el territorio.

En contrapartida, Rabat expresó su disposición a negociar, en el marco de la ONU, una autonomía para el territorio y añadió la novedad de cumplir con la "exigencia democrática" de someter a votación dicho estatuto autonómico.

La última iniciativa para intentar lograr la resolución del conflicto fue la propiciada por la resolución 1754, que anima a Marruecos y al Frente Polisario a iniciar negociaciones directas "sin condiciones y de buena fe" bajo los auspicios del secretario general de la ONU, Ban Ki Moon.

El texto "toma nota" de las propuestas presentadas a Naciones Unidas por Marruecos y el Frente Polisario a mediados de abril y saluda los "esfuerzos serios y creíbles" de la parte marroquí para "hacer avanzar el proceso hacia una solución". Esta última parte fue utilizada por Marruecos, que consideró que su propuesta de autonomía recibió una mejor acogida que la de los saharauis.

En junio de este mismo año conmenzaron las negociaciones directas, pero tras varias rondas de contactos ninguna de las partes cedió en sus planteamientos fundamentales.