Putin no descarta firmar la Carta de Energía pero considera que hay que introducir algunas modificaciones
LAHTI (FINLANDIA), 20 Oct. (De los enviados especiales de EUROPA PRESS, Juan Sanhermelando y Leyre Guijo) -
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea y el presidente ruso, Vladimir Putin, coincidieron hoy durante la cena que mantuvieron en la ciudad finlandesa de Lahti en la necesidad de reforzar su asociación estratégica, sobre todo en materia de energía, mediante la elaboración de un nuevo acuerdo marco de partenariado en el que Putin se dijo dispuesto a incluir la Carta de la Energía pero con la modificación de "algunas fórmulas".
"La UE quiere edificar una asociación con Rusia con beneficios a largo plazo", declaró el primer ministro finlandés y presidente de turno de la UE, Matti Vanhanen, mientras que Putin se dijo "determinado a establecer una relación sólida y mutuamente beneficiosa". El presidente ruso consideró que "la dependencia mutua sólo contribuye a la seguridad energética de continente y nos permite estar más cerca" y añadió que Rusia depende más de la UE que a la inversa.
Putin dijo que acepta las exigencias de la UE en materia energética de reciprocidad, transparencia, no discriminación y apertura de mercados, pero insistió en su rechazo a ratificar la Carta de la Energía, adoptada por la UE y en la que se estipulan los principios para fomentar la cooperación energética a largo plazo, porque considera imprescindible realizar antes la modificación de "algunas fórmulas" que no especificó.
En este sentido, el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, subrayó que se trata de "principios cruciales para la seguridad energética", pero, subrayó "lo importante es ponerlos en práctica". "La UE quiere una Rusia como suministrador predecible y seguro que también Rusia quiere predictabilidad de la UE", aseguró. Así, insitió en que "la energía debería ser un elemento clave en el nuevo acuerdo marco" que los europeos y Moscú firmarán próximamente, dijo, si bien admitió que "sería un error centrarse en energía cuando tenemos un amplio campo de cooperación" en otras materias.
En todo caso, Putin insistió en que Rusia no rechaza la cooperación de socios extranjeros en proyectos energéticos y se mostró dispuesto a negociar con la petrolera británico-holandesa Shell, a quien a suspendido la explotación del yacimiento de Sajalín 2 por problemas medioambientales.
Por otra parte, Vanhanen dijo que aunque "muchos esperaban antes de esta cumbre que estaríamos divididos", lo cierto es que el debate previo de los Veinticinco les ha permitido "encontrar un mensaje" antes de reunirse con el presidente ruso.
OTROS TEMAS
Según reconoció el presidente de turno de la UE, durante la cena, "en un ambiente informal", se produjeron "discusiones intensas, abiertas y sinceras". El presidente ruso coincidió en que había mantenido un "intercambio franco y abierto" con sus homólogos europeos. Según indicaron a Europa Press fuentes europeas, algunos de los participantes, sobre todo los países bálticos y algunos del este, plantearon abiertamente a Putin el problema de los Derechos Humanos así como la situación en Chechenia o en Georgia.
Vanhanen indicó que también se habló con el presidente ruso sobre cuestiones internacionales y la cooperación en ellas de ambas partes, así como del reciente asesinato de la periodistas Anna Politoskaya, de cuya muerte la UE "pidió la plena investigación y que se lleve a los responsables ante la justicia".
En cuanto a Georgia, la UE expresó su "preocupación por la escalada de la violencia", según explicó Vanhanen. A este respecto, Putin insistió en que Rusia no fue quien desencadenó la crisis en las relaciones con Moscú ya que, dijo, "la cuestión son las relaciones entre Georgia y Osetia del Sur y Abjazia", sus dos repúblicas secesionistas.
En este sentido, el presidente ruso advirtió de que la situación "se encamina hacia el desastre" e instó a "evitar el derramamiento de sangre en la región". Asimismo, aseguró que "tan pronto como haya una relación diferente entre Georgia y Osetia del Sur y Abjazia, la relación entre Rusia y Georgia se normalizará".
