ANKARA, 3 Jun. (Reuters/EP) -
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha dicho este martes que espera que el Banco Central rebaje los tipos de interés y ha criticado su actual postura. Erdogan también ha mostrado su preocupación por la interferencia política en las medidas monetarias.
El banco bajó sus tasas el mes pasado, por primera vez en un año, a pesar de la alta inflación, después de que Erdogan pidiera una reducción. El primer ministro trabaja para mantener el crecimiento económico de cara a las elecciones presidenciales de agosto y a los comicios parlamentarios de 2015. Erdogan parte como favorito para ganar las elecciones presidenciales, aunque todavía tiene que anunciar su candidatura.
Después de que el gobernador del Banco Central, Erdem Basci, defendiera ante el Gobierno la política bianual de esta institución, Erdogan ha afirmado que los últimos datos muestran que la inflación no ha caído. "No encuentro su preocupación por los tipos de interés en absoluto positiva y no la acepto", ha manifestado el primer ministro turco.
Erdogan ha señalado los altos tipos de interés como causa de la alta inflación. "Espero que se tomen nuevos pasos inmediatamente y que este asunto se resuelva", ha añadido. Los comentarios de Erdogan se notaron levemente en los mercados y la lira se mantiene en 2,1082 frente al dólar.
Los datos del martes muestran que la inflación turca subió menos de los esperado en mayo. Sin embargo, el incremento anual sigue por encima de las predicciones del banco para final de año. Los precios se han elevado un 0,4 por ciento en mayo y se espera que a final de año se llegue al 9,66 por ciento, según las cifras del Instituto Turco de Estadística.
REBAJA SORPRESA
El Banco Central sorprendió a los mercados el mes pasado cuando rebajó la tasa 'repo', la principal con la que se financia el mercado, en 50 puntos básicos hasta el 9,5 por ciento.
Sin embargo, para Erdogan la rebaja no es suficiente. El ministro de Economía, Nihat Zeybekci, ha presionado todavía más al Banco Central al pedir una bajada de los tipos de interés en línea con la caída de los intereses de los mercados.
El viceprimer ministro, Bulent Arinc, ha restado importancia a las interferencias políticas después del encuentro del gabinete el lunes, y ha asegurado que el Gobierno cree en un Banco Central independiente y sin interferencia en la política monetaria.
El Banco elevó las tasas drásticamente a finales de enero para combatir una caída de la lira a mínimos, sin tener en cuenta la presión política para mantener los tipos bajos.
En su presentación al gabinete, Basci ha recordado que un "debilitamiento temporal a corto plazo de los tipos de interes" había sido una herramienta efectiva para luchar contra la inflación y que una rápida depreciación en la lira también habría servido.
Basci afirmó en abril que había visto margen para una reducción gradual en los tipos, pero descartaba un ciclo prolongado en este sentido. Según el gobernador, las políticas podrían permanecer ajustadas hasta una clara mejora en los pronósticos de inflación.
