MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El miembro del comité ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y jefe del equipo negociador palestino, Saeb Erekat, ha criticado duramente este jueves al Gobierno israelí por su decisión de aprobar 1.500 nuevas viviendas en asentamientos en Cisjordania y Jerusalén Este.
"El Gobierno israelí celebra los 47 años de ocupación y crímenes de guerra con la aprobación de miles de nuevas viviendas en los Territorios Palestinos Ocupados debido a que la comunidad internacional no ha actuado para detener las actividades ilegales en los asentamientos", ha dicho.
En este sentido, ha solicitado a la comunidad internacional "que tome todas las medidas posibles para forzar a Israel, como potencia ocupante, a que rinda cuentas por sus violaciones diarias de los derechos de los palestinos y del Derecho Internacional".
"El Gobierno del primer ministro (Benjamin) Netanyahu ha reafirmado su intención de desafiar al Derecho Internacional y los esfuerzos internacionales de paz colonizando nuestro país", ha agregado.
"En esta ocasión, Israel utiliza la unidad nacional palestina, un paso aplaudido por la comunidad internacional, como una excusa para continuar su colonización", ha criticado, según ha informado la agencia oficial palestina, WAFA.
Por ello, ha sostenido que la OLP considera que esta decisión israelí "es una muestra clara de que (Israel) va a ir hacia un mayor enfrentamiento, a través de nuevos asentamientos, la anexión de territorios ocupados y el traslado forzoso (de población)".
"Mientras, Israel continúa cometiendo crímenes contra la gente que vive bajo ocupación, incluyendo malos tratos a miles de palestinos que están en cárceles israelíes, ataques y provocaciones diarios en la Explanada de las Mezquitas, y el bloqueo draconiano contra la Franja de Gaza", ha añadido.
"Estamos estudiando seriamente nuestra respuesta. Es el momento de que la comunidad internacional haga responsable al Gobierno israelí de sus crímenes de guerra", ha dicho, antes de reclamar a la comunidad internacional "que asuma sus responsabilidades, incluyendo la prohibición de todos los productos fabricados en asentamientos israelíes y la retirada de inversiones de las empresas que participan directa o indirectamente en la ocupación".
EL NUEVO ANUNCIO DE ASENTAMIENTOS
El ministro de Vivienda de Israel, Uri Ariel, ha destacado que la decisión ha sido tomada en respuesta a la formación del nuevo Gobierno de unidad palestino entre el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y el Movimiento Al Fatá, del presidente palestino, Mahmud Abbas, prestó juramento el martes en la ciudad cisjordana de Ramala.
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha expresado este mismo jueves su "profunda preocupación" por la decisión del Ministerio de Vivienda de Israel de autorizar la construcción de 1.500 nuevas viviendas, recordando que la misma "es ilegal bajo el Derecho Internacional".
"El secretario general pide a Israel que se ciña a los llamamientos de la comunidad internacional, congele su actividad en los asentamientos y cumpla sus compromisos con el Derecho Internacional y la 'hoja de ruta'", ha indicado en un comunicado el portavoz de Ban, Stephane Dujarric.
El propio Ban se mostró hace unos días dispuesto a dar su "pleno apoyo" al nuevo Gobierno de unidad palestino, al tiempo que confió en que "pronto emerjan nuevas oportunidades para la solución de los dos estados", después de la ruptura de las negociaciones directas de paz.
"Naciones Unidas está preparada para dar su pleno apoyo al nuevo Gobierno palestino en su esfuerzo por unificar la Franja de Gaza y Cisjordania", dijo el martes, apuntando como algunos de los retos de este Ejecutivo a la situación humanitaria y económica y a la celebración de elecciones.
La Unión Europea y Estados Unidos también han manifestado su voluntad de trabajar con el nuevo Gobierno palestino, siempre y cuando mantenga su adhesión al reconocimiento de Israel, la no violencia y la solución de los dos estados.
Por su parte, Israel ha dicho que está "profundamente decepcionado" con la decisión estadounidense de apoyar el nuevo Gobierno palestino, recordando que está respaldado por Hamás, "que es una organización terrorista comprometida".
