MADRID, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
Representantes del Consejo de Europa, la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) y Naciones Unidas subrayaron hoy la importancia del diálogo intercultural para afrontar las amenazas actuales y se comprometieron a mantener la promoción de este tipo de diálogo como una de sus prioridades y a reforzar su colaboración en esta materia, según indicaron en un comunicado conjunto.
En una reunión tripartita celebrada en Estrasburgo, sede del Consejo de Europa, las organizaciones discutieron diferentes aspectos del diálogo intercultural, particularmente el papel de los Derechos Humanos, la promoción de las competencias interculturales en el ámbito de la educación, así como la relación entre el diálogo intercultural y la promoción de conflictos.
Afirmaron que el diálogo intercultural puede ayudar a encontrar una respuesta a las amenazas actuales y recalcaron que este tipo de diálogo necesita apoyo en el terreno político.
En este sentido, instaron a los Estados a alentar el diálogo interreligioso e intercultural con el objetivo de reducir las tensiones y, de esta manera, ayudar a prevenir atentados terroristas. Asimismo, destacaron la continua necesidad de afrontar las condiciones que conducen a la radicalización y la extensión del terrorismo, al mismo tiempo que se persigue y se juzga a los terroristas.
A este respecto, los participantes de la reunión tripartita celebraron las iniciativas internacionales que se han puesto en marcha recientemente para promover el diálogo intercultural a todos los niveles.
En concreto, se refirieron al diálogo de alto nivel sobre el entendimiento y cooperación interreligiosa e intercultural para la paz que celebró la Asamblea General de la ONU en octubre de 2007; a la 'Alianza de Civilizaciones' auspiciada por la Secretaría General de la ONU y al panel de diálogo intercultural sobre Derechos Humanos celebrado por el Consejo de Derechos Humanos durante su séptima sesión en marzo de 2008.
También citaron las actividades desarrolladas por las instituciones de la OSCE para la promoción del diálogo intercultural, como la organización de debates y de actividades formativas dirigidas a distintos públicos sobre la materia, y las iniciativas del Consejo de Europa, como la publicación del Libro en Blanco sobre el Diálogo Intercultural, lanzado por su comité de ministros en mayo de 2008, que ofrece un marco conceptual y una guía para políticos y profesionales.
Las tres partes reiteraron la importancia de la educación para la promoción del diálogo intercultural, así como de las autoridades públicas, la sociedad civil, las instituciones religiosas, los medios de comunicación y otros colectivos sociales. Estos actores deben contribuir a proporcionar a personas de todas las edades, pero especialmente a los jóvenes, los conocimientos y las herramientas necesarios para poder convivir de forma pacífica en sociedades multiculturales.
Asimismo, confirmaron que los Derechos Humanos --civiles y políticos, así como económicos, sociales, culturales, junto a los derechos de las minorías y las políticas de integración-- constituyen la base sobre la que mantener el diálogo intercultural entre las sociedades democráticas. Asimismo, describieron los Derechos Humanos como la mayor fuerza de cohesión social, estableciendo estándares de libertad, justicia, igualdad y solidaridad.
Por último, los organismos declararon su determinación para reforzar la coordinación y cooperación entre ellos en el área del diálogo intercultural y acordaron que la próxima reunión tripartita será acogida por la ONU en 2009.
