ATENAS, 10 Dic. (Reuters/EP) -
El estudiante anarquista griego Nikos Romanos, de 21 años, ha puesto fin a la huelga de hambre que mantenía después de obtener permiso para asistir a las clases de la Universidad con una pulsera electrónica de seguimiento, según ha informado este miércoles su abogado, Fragiskos Ragkousis.
Romanos, condenado en octubre a una pena de cárcel por robo, se ha negado a comer durante un mes y ha estado en situación crítica después de reclamar el derecho de asistir a clase en persona.
Además, el estudiante anarquista decidió este miércoles dejar de tomar líquidos, justo antes de que el Parlamento aprobara una medida que permite a los encarcelados asistir a clase con una pulsera electrónica después de un semestre de estudio a distancia.
"Han vencido la democracia y la legitimidad", ha afirmado Ragkousis. "Este chico ha luchado por su vida, ha superado una situación muy dolorosa y difícil. Lo importante es que se ha salvado una vida", ha añadido.
El pasado domingo, miles de personas se manifestaron en Atenas para conmemorar la muerte de un adolescente a manos de la Policía en 2008 y pedir solidaridad con Romanos, testigo de aquel suceso.
