SAN JUAN (PUERTO RICO), 30 Dic. (EP/AP) -
Un preso afgano recluso de la prisión militar estadounidense de Guantánamo identificado como Abdul Razzak falleció bajo custodia por un cáncer colorrectal, según informó el Ejército estadounidense. Su muerte fue certificada por un médico en la mañana de hoy.
El detenido estaba siendo sometido a quimioterapia desde el pasado mes de septiembre, cuando comenzó a quejarse de un dolor de estómago. Rizzak trabajaba como conductor para los talibán y dirigía una célula talibán afgana.
"Los restos del fallecido están siendo tratados con el máximo respeto. Un asesor cultural y un imán aseguran que sus restos serán tratados de una forma apropiada tanto cultural como religiosamente", explica el comunicado.
Un portavoz de la base, el comandante Rick Haupt, indicó que se proporcionará más información sobre el destino de los restos mortales de Razzak cuando estén disponibles en el campamento. "Desde luego lamentamos la pérdida de cualquier vida", afirmó Haupt en declaraciones telefónicas. "Recibió el mejor trato posible".
Un representante del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) fue testigo de los cuidados proporcionados a Razzak antes de su muerte, explica el comunicado.
Estados Unidos acusa a Razzak de participar como conductor y escolta en un convoy en el que viajaba el líder de Al Qaeda, Usama bin Laden y de estar implicado en el intento de asesinato de funcionarios afganos. Él, sin embargo, negaba las acusaciones.
En Guantánamo quedan unos 275 hombres, presos por su presunta relación con Al Qaeda o los talibán. Sin embargo, las autoridades que entre 80 y 90 de ellos podrían comparecer ante tribunales militares. Entre ellos estaría Jalid Sheij Mohamed, el arquitecto confeso de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
